Los vampiros están de regreso

Luego de mucho esperar los seguidores laguneros de la saga "vampiresca" podrán disfrutar al primer minuto de este jueves el pre-estreno de Luna Nueva, donde el galán de moda Robert Pattinson volverá a hacer suspirar a todas las jovencitas "terrenales" de la región, y por supuesto, de todo el mundo.

"Todo en Luna Nueva fue difícil, es el libro más complicado. Yo no tenía referente en la vida real para entender el mundo de la saga de Crepúsculo, así que en esta película, como no filmamos de manera cronológica, tuve que ser algunos días una zombi y otros, una persona llena de vida", indicó Kristen Stewart, quien interpreta a Bella, durante la visita que hizo a México este mes para promover el filme.

La película, que mañana se preestrena con 830 copias, es la segunda entrega de las novelas de Stephenie Meyer, que, bajo la dirección de Chris Weitz, muestra el peligro que corre el corazón cuando se enamora.

"Claro, estamos contando una historia de vampiros, hombres lobo y lo sobrenatural, pero más allá trata de sentimientos tan básicos como el amor, el deseo, la necesidad, la pérdida, el cariño y la amistad", señaló el cineasta en notas de producción.

Para festejar el cumpleaños 18 de Bella, la familia Cullen prepara una fiesta que pretenden sea inolvidable, y lo es, pero no por el motivo adecuado, sino porque uno de los miembros del clan intenta matarla, por lo que Edward (Robert Pattinson) la abandona para no ponerla en peligro. Así, Luna Nueva es testigo de la profunda depresión en que la chica cae.

"No hay forma de dirigir a alguien de una forma técnica cuando tiene el corazón roto. Lo que Chris me decía es que me pusiera en el espacio de Bella, y me centrara en la pérdida de Edward y también en su relación con Jacob (Taylor Lautner). Chris nunca se mete con los actores, trata de estar lejos para dejar que las cosas fluyan. Es muy considerado y compasivo.

"Escribió 15 páginas de cómo filmaría la película y cómo serían los aspectos emocionales y técnicos. Ningún director con el que había trabajado había hecho eso, son las cosas que agradeces, te deja ser tú mismo y ésa es la única manera en que la película puede ser mejor", indicó Kristen.

Para intentar llenar el vacío que deja Edward con su partida, la joven comienza a buscar dosis de adrenalina al tiempo que fortalece su amistad con Jacob.

"Él es la mejor opción para Bella. Tiene una gran personalidad, está sonriendo todo el tiempo y ella lo dice en el libro: 'Es como su propio Sol'. Edward, en realidad, no es una elección como tal pues ella es adicta a él", añadió la actriz.

Así, con los trozos de sus respectivos corazones en las manos, Bella, Edward y Jacob se adentran nuevamente en los senderos de Forks, con el deseo de que el dolor y las heridas desaparezca al pasar la Luna Nueva.

Vive LA noche mágica

Vampiros, lobos y estrellas descendieron el lunes por la noche a la premier de Luna Nueva, la secuela de Crepúsculo (Twilight) en una sala de cine de Westwood, California, en donde destacaron los protagonistas Robert Pattinson, Taylor Lautner, Kellan Lutz y Kristen Stewart.

Los actores de "New moon" que se estrenará el próximo viernes en lo que se da como descontado sea un arrollador y taquillero estreno en cines de Estados Unidos, recorrieron la alfombra roja en la que posaron para la prensa y admiradores, además de firmar autógrafos.

En los cines Mann Bruin de Westwood Village, desde el pasado viernes algunos aficionados acamparon y se colocaron en línea para ser los primeros en presenciar la premier, así como la proyección de la nueva producción fílmica basada en historia de vampiros románticos.

"Estamos felices por la respuesta. A nuestro alrededor hay mucha energía humana que te da confianza. Esta es una oportunidad única en la vida", alcanzó a comentar Stewart mientras era agobiada por gritos de los fans, muchos con carteles y pancartas en alusión a la película y sus artistas admirados.

Pattinson, de 23 años de edad, con su ya característico cabello despeinado, se mostró muy relajado y sonriente, además de firmar autógrafos y posar para todos aquellos que se lo pedían como lo hicieron Lautner y Lutz.