Luego de dos años, aún no concluye auditoría a Simas

La auditoría, con un costo de 1.5 millones, fue ordenada por el Congreso del Estado.

A más de dos años de que comenzó la auditoría externa al Simas, ordenada por el Congreso del Estado, con un costo de 1.5 millones de pesos, aún no ha concluido. No hay responsabilidades técnicas, administrativas o contables y ni siquiera un dictamen.

Alberto Díaz de León, gerente de Simas, asegura que desde que se fueron los auditores del despacho González de Aragón, contratados ex profeso por el Congreso del Estado, no han tenido noticias.

“Nunca regresaron y hasta la fecha no hemos recibido ninguna notificación”, señala.

Agrega el gerente general del Simas que lo único cierto es que “no se cometieron irregularidades, porque de haber sido así, ya hubiéramos recibido las recomendaciones o sanciones”.

González de Aragón fue el despacho externo contratado por el Congreso del Estado para realizar lo que fue una segunda auditoría a la abastecedora de aguas de Torreón por el mismo concepto. Díaz de León asegura que la revisión fue muy exahustiva y completa, “de acuerdo con toda la documentación técnica, y financiera que les proporcionamos y hasta fue de más”.

Fue en diciembre de 2006 cuando el Congreso del Estado acordó que se realizara una auditoría externa integral al Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento ante la presunción de irregularidades cometidas en el manejo de un crédito por 74 millones de pesos, solicitado a Banobras durante la Administración del ex alcalde de Torreón, Guillermo Anaya Llamas. Las participaciones municipales quedaron en garantía. Se revisarían las cuentas de 2004 y 2005.

Del crédito, 64 millones serían para la reparación de 16 colectores sanitarios que se “colapsaron” en el último año de su Gobierno y era urgente repararlos ante el riesgo de sufrir una contingencia sanitaria. Los otros 10 millones servirían para la construcción de 10 kilómetros de una red denominada “línea morada”, que operaría desde las instalaciones de la planta tratadora de aguas residuales, ubicada en el ejido Rancho Alegre, hacia áreas del sector fabril de Mieleras para el traslado de las aguas tratadas que se proyectaba serían compradas por el sector industrial. La mencionada auditoría comenzó hasta finales de mayo de 2007. Díaz de León indica que abarcó lo técnico, pero también fue física, pues “se hicieron recorridos por las áreas donde se repararon los colectores. Los auditores tomaron fotografías y hasta se hizo autopsia en varios de ellos para verificar la existencia de los tubos del drenaje, su material y grosor. Había sospechas de que la calidad de los tubos no era la apropiada”.

El gerente del Simas se queja del tiempo invertido en recopilar la información para los auditores y que no se sepa, “más de dos años después, para qué sirvió y cuál era el fin de gastar 1.5 millones de recursos públicos”.

La última información oficial fue emitida a mediados del año pasado por el entonces presidente de la Junta de Gobierno, Horacio del Bosque, que se fue prometiendo el resultado de la auditoría, “en unos cuantos días más’’.

El Simas es actualmente uno de los organismos descentralizados de la Administración Municipal más vigilados. “Y eso nos quita mucho tiempo porque de alguna manera descuidamos el trabajo del día a día que demanda una empresa como ésta’’, dice Díaz de León. Son tres auditorías más las que se le practican en estos momentos, “y en todas ellas tenemos que cumplir’’.

A más de dos años

Se desconocen los resultados de la auditoría externa practicada al Simas por el despacho González de Aragón que tiene filiales en Saltillo, México y Monterrey.

´Se auditaría primero, segundo y cuarto trimestre de 2004. Además segundo y tercer trimestre de 2005.

´ Además, serían auditadas las obras realizadas con los recursos de un crédito de 74 millones de pesos solicitado en 2004 durante la Administración del ahora senador Guillermo Anaya.

´ Esta revisión costó 1.5 millones de pesos.

Fuente: Simas