Desnudos. La actriz, quien actualmente participa en la telenovela Hasta que el Dinero Nos Separe, dice que ha rechazado varias propuestas para desnudarse en la pantalla grande. EL UNIVERSAL
MéXICO, DF.- Malillany posee una figura envidiable y, aunque pareciera que su belleza es un arma para cautivar a los productores y ganarse los personajes de telenovela, como el de "La buenona" en Hasta Que el Dinero Nos Separe, la actriz cubana asegura tajante que es más que una cara bonita.
No obstante, reconoce que como actriz ha tenido que luchar contra quienes consideran que por tener ciertos atributos físicos no tiene nada de talento.
Insiste además en que no es una "encueratriz", ya que en México le ofrecieron hacer dos películas cuyos roles consistían en realizar semidesnudos.
"Realmente estoy contenta con mi apariencia. Pero debo de admitir que el físico ha sido un impedimento, algo que me ha hecho tener que demostrar al doble que estoy preparada y que continuaré con mi preparación por siempre. Es muy fácil que te cataloguen por el físico o por cómo luces. Finalmente soy actriz y lo que quiero es destacar en mi trabajo. Quiero dedicarme a esto toda mi vida porque es mi pasión. Por eso decidí estudiar aquí durante tres años en el CEA (Centro de Educación Artística de Televisa). Ser una gran actriz es mi sueño", dice quien dejó su país hace ocho años después de dedicarse al modelaje e incluso participar en la película "Tiempo muerto", una co producción cubano-española.
→ Demostrar al doble que eras actriz, ¿fue un gran reto?
Sí. De repente te invitan a castings donde, por ejemplo, te piden que hagas a la femme fatale (mujer fatal). Y si te dan ese tipo de personajes está bien; la diferencia está en cómo los vas a desarrollar. Cada actor lo hace de una manera diferente. A mí me pueden dar el personaje que quieran porque finalmente soy actriz; no soy encueratriz; no soy de poses. Estoy lista para encarnar cualquiera que me ofrezcan. Tengo la capacidad para hacerlos, y del que no, pues ya me prepararé porque no me gustan los límites.
→ ¿Hasta qué punto continuarías aceptando personajes de la mujer sexy con escote y minifalda?
No me ha tocado realmente hacer un personaje así hasta antes de entrar a trabajar en esta telenovela del señor Emilio Larrosa. Hacer comedia es un género difícil. Los comediantes tienen todos mis respetos... La comedia en particular necesita de una gran energía; no es fácil hacerla.
→ ¿Pero en algún momento te desanimó que se adelantaran a pensar de que sólo eras una actriz con atributos físicos?
No, porque las acciones siempre hablan por uno mismo. La gente puede decir lo que quiera, pero en el momento en que te dan la oportunidad de hacer algo o emprender un proyecto en teatro o televisión, con el trabajo te toca demostrar tu talento. Mi tarea está en construir al ser que hay dentro de mí haciendo cada vez mejor mi trabajo y preparándome cada día. No es algo que me moleste. Esta carrera es como la medicina; cada año tienes que ir creciendo al prepararte con nuevos conocimientos; nunca debes de dejar de estudiar -comenta quien de joven deseaba recibirse como abogada.
Antes de Hasta que el Dinero Nos Separe, la actriz ya había tenido participaciones en otras telenovelas como Un Gancho al Corazón y Rebelde.