Es una falla en la higiene que representa un grave riesgo para la salud de millones de personas, a causa de una limpieza inadecuada.
Es una falla en la higiene que representa un grave riesgo para la salud de millones de personas, a causa de una limpieza inadecuada.
Una diarrea, vómito y/o fiebre pueden ser contagiados por un descuido, un mal hábito de la mayoría de los mexicanos: no lavarse las manos de manera adecuada y cuando es necesario. Este problema llega a ser generador de males como hepatitis tipo B, salmonelosis o gastroenteritis, así como de infecciones respiratorias.
Algo que todo mundo debe saber es que las manos se contaminan con diferentes microorganismos, los cuales se adquieren con facilidad y en cualquier momento del día, al tocar objetos en casa o trabajo, por el uso de transporte público, y al acudir al baño, entre muchas otras acciones.
Juego de manos
La limpieza de manos es sencilla y rápida, pero sólo 20% de los mexicanos la cumplen debidamente; el doctor Tomás de la Mora Chávez, especialista del Instituto Mexicano del Seguro Social, nos explica que el proceso de contagio inicia cuando se toca el objeto con las yemas de los dedos, los gérmenes van a la palma y se establecen, al tener contacto con la cara, boca, ojos, nariz u oídos, se introducen al organismo.
La gente debe aprender que no basta con lavarse las manos antes de cada comida o después de ir al baño, “hay que asearse cuantas veces sea necesario, porque los gérmenes y bacterias se encuentran al aire libre; limitar la higiene a tres lavados de manos al día aumenta el riesgo de sufrir alguna infección”.
En este escenario, la doctora Blanca Susana Martínez Cruz advierte que quienes usan anillos o joyas, así como las que tienen las uñas largas, corren el riesgo de que en las hendiduras se formen nidos de bacterias, así como en la piel que se encuentra en torno a esos accesorios.
Los niños, señala, son por edad, el grupo más vulnerable a padecer infecciones por manos contaminadas. Hasta 80% de las enfermedades estomacales y de piel que se presentan es por causa de las extremidades sucias.
Un dato de miedo lo da el doctor De la Mora Chávez: “A escala mundial, tres y medio millones de infantes fallecen al año por males respiratorios y gastrointestinales”.
Solución con agua y jabón
Los productos como cremas y toallitas funcionan, pero la forma más eficaz para evitar infecciones de este tipo es lavarse las manos con agua y jabón cuantas veces sea necesario. La especialista del IMSS dice que el uso de gel antibacterial es bueno, pues su presentación permite transportarlo fácilmente a la oficina o restaurante, además de que se ahorra en agua y papel.
Elsa Montero Villagrán, experta en Medicina Preventiva, nos explica que para lavarse correctamente las manos es necesario tener “agua, jabón, toallitas de papel de un solo uso; retirar reloj, anillos y joyas; mojarse las manos con una cantidad suficiente de agua, tomar el jabón en pasta o líquido, hacer diez movimientos giratorios con la palma de la mano, igual número en los dorsos y entre los dedos, las puntas y en especial el pulgar”.
