TESTIGOS. Los mezquites y arbustos fueron los únicos que presenciaron el crimen.
La sangre que brotaba de sus heridas se mezcló con la tierra. El cuerpo sin vida de un hombre fue encontrado en terrenos de la colonia Nogales, en Lerdo.
Boca abajo
Poco después de las 2:45 de la tarde de ayer, se reportó el tétrico hallazgo del cadáver. Cuando llegaron los elementos de seguridad, encontraron que aún fluía sangre y masa encefálica de las heridas, por lo que se dictaminó que la hora aproximada de la muerte del hombre fue a las 2:30, pocos minutos antes de que se diera aviso.
El hombre estaba tirado entre dos mezquites, boca abajo, con el brazo izquierdo bajo la cabeza y el derecho bajo el torso. Presentaba dos impactos en la nuca, mismos que salieron por la frente, localizándose cerca del cadáver dos casquillos de calibre 9 milímetros.
Las primeras indagatorias indican que al parecer el hombre llegó en un taxi al lugar donde perdió la vida, que es prácticamente como un terreno baldío, pues hay muchos mezquites, arbustos y pocas casas. Dicho lugar está donde termina la calle Jazmines de la colonia antes mencionada.
Media filiación
El hombre asesinado tenía apróximadamente 55 años, era de complexión robusta, tez morena y cabello chino entrecano. Vestía camisa de manga larga color gris, pantalón de mezclilla azul, zapatos tipo bostonianos negros y cinto piteado de color café, en cuya hebilla tenía las iniciales LRV. No se le localizaron pertenencias y los bolsillos de su pantalón estaban de fuera, como si alguien lo hubiera esculcado.
El occiso está en calidad de desconocido en las instalaciones del Semefo.
