Las personas con sobrepeso y obesidad son más propensas a contraer la diabetes.
Salud
Aun en las condiciones más dramáticas se puede salvar una extremidad dañada, aunque la atención requiere de tiempo.
Durango. En la mayoría de los casos en los que se presenta el pie diabético se puede evitar la amputación; pero al requerir el paciente un tratamiento prolongado y exhaustivo, resulta más fácil practicar la cirugía, indicó Marco Humberto Terrones, miembro de la Sociedad Mexicana del Pie Diabético.
El Médico General, quien refiere tener más de diez años tratando a personas con este padecimiento, menciona que aquí en Durango no existe una unidad especializada en la curación de úlceras, heridas crónicas y pie diabético, males que requieren un trato especial debido a su complejidad.
Dijo que el pie diabético, aun en las condiciones más dramáticas, es rescatable, siempre y cuando se establezca un diagnóstico preciso, pero este padecimiento en muchas ocasiones es mal tratada hasta llegar al extremo de amputar la extremidad.
El pie diabético en ocasiones puede lucir tan mal que en ocasiones los médicos optan por la amputación como la medida más viable de curación, sin tomar en cuenta que el tratamiento de este problema de salud requiere de tiempo.
Se trata de estar haciendo curaciones por la mañana, tarde y noche, mientras que la evolución favorable se puede presentar hasta las 14 ó 16 semanas, refirió el médico, quien se ostenta como miembro de la Sociedad Mexicana del Pie Diabético y actualmente trabaja en Puerto Peñasco, Sonora, con personas que padecen este problema.
Comenta que hay médicos que simplemente no se quieren poner a hacer las curaciones, por el tiempo que se debe dedicar al tratamiento, pero además se debe tener el conocimiento de cómo se debe tratar una herida en la extremidad y saber sus fases de cicatrización para poder dar la atención adecuada.
“Aquí en Durango he visto que en las casas comerciales venden parches, alginatos de plata e hidrocoloides, pero piensan que esos implementos con su sola aplicación van a salvar la extremidad, pero no es así, pues el tratamiento debe ser integral”.
Si el diabético no toma las medidas preventivas adecuadas está en riesgo de llegar al grado de perder sus extremidades, pues al dañarse los nervios se pierde la sensibilidad y se facilitan así las lesiones, ya que el pie se encuentra en un sitio cerrado, es un ambiente ideal para bacterias que se comen el tejido.
Daniel Estrada
El mejor tratamiento
Durango. Marco Humberto Terrones, miembro de la Sociedad Mexicana del Pie Diabético, dijo que aquí en Durango se requiere demostrar que antes de entrar al quirófano la extremidad se puede salvar.
Refirió que con relación a la labor que desempeña en Sonora, cuenta con expedientes clínicos, fotografías y videos que sustentan lo que informa, mientras que a la fecha trata entre dos o tres pacientes por semana, algunos incluso de Phoenix y Tucson, Arizona, del vecino Estados Unidos.