El ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, José Ramón Cossío, será el encargado de atender el juicio de controversia constitucional que promovió la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) el viernes pasado, en contra del decreto que emitió el presidente Felipe Calderón para desaparecer a la compañía de Luz y Fuerza del Centro (LyFC).
Cossío tendrá que decidir si admite o no la demanda que promovieron los asambleístas. Para hacerlo no tiene un plazo establecido, pero normalmente este tipo decisiones las adoptan los ministros en uno o dos días.
El líder del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), Martín Esparza, se enteró de que el caso le había tocado al ministro Cossío, por riguroso turno, al salir de la Corte y revisar las listas de notificaciones.
Esto último después de dejar, en la Oficialía de Partes y la oficina de la presidencia del máximo tribunal del país, la petición del sindicato para que la Corte ejerza la facultad que tiene para investigar violaciones graves de garantías en el caso de la extinción de LyFC.
El presidente de la Corte, Guillermo Ortiz Mayagoitia, no pudo recibir al líder de los electricistas este lunes, porque al momento del arribo de éste al alto tribunal, aquél se encontraba en una sesión pública en la que los ministros estaban resolviendo un juicio vinculado con una reforma electoral en Aguascalientes.
No obstante, después de dejar las instalaciones de la Corte y al dirigirse a los cientos de trabajadores que lo acompañaban, el líder sindical expresó su confianza en las decisiones que adoptará el máximo tribunal y, en general, el Poder Judicial.
En particular, Esparza criticó al secretario del Trabajo, Javier Lozano, por considerar "una aventura" el juicio de amparo promovido por el sindicato y firmado por alrededor de 26 mil electricistas.
"Se está metiendo con los jueces y se le olvida que en este país hay tres poderes", dijo, luego de recordar que la jueza Guillermina Coutiño Mata les había concedido, el viernes pasado, una suspensión definitiva para que la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje no resolviera todavía sobre la terminación o no de la relación laboral entre el gobierno y el sindicato.
Durante la manifestación fueron notorias las cartulinas dirigidas a los ministros de la Corte y, en especial, a la juez, como la que decía:
"Guillermina Coutiño Mata eres la esperanza de México (como juez y mujer) contra la violación de la Constitución del decreto de Calderón. 66 mil familias te lo agradeceremos toda la vida. El SME te apoya hasta la victoria".
Después de informar sobre sus actividades en la Corte, Martín Esparza convocó a sus compañeros para que se dirigieran a manifestarse, ahora, frente a las instalaciones del Senado.