El exégeta N. sostenía que el infierno es un lugar de fuego.
El exégeta C. sostenía que el infierno es la ausencia de Dios.
Esa diferencia de opiniones hizo de ellos mortales enemigos. En artículos y conferencias se aludían el uno al otro en modo despectivo, pero sin mencionarse por sus nombres, pues eran personas religiosas.
Un día riñeron en tal modo que se dieron la muerte el uno al otro. Cuando se vieron en la presencia del Señor éste les preguntó:
-¿Por qué están aquí?
Respondió el exégeta N:
-Porque yo digo que el infierno es un lugar de fuego, y éste afirma que el infierno es la ausencia de Dios.
Desconcertado, preguntó el Señor:
-¿Qué es eso de "infierno"?
¡Hasta mañana!..