PAN: su nuevo dirigente
PRD: expulsarlo o no expulsarlo esa es la cuestión
Eventos Muy Importantes Se están gestando al seno de Acción Nacional, el partido del presidente Calderón, pero también al interior del PRD y sus "tribus". Ambos partidos deberán resolver en un tiempo perentorio la problemática que existe a su interior y que a raíz de los resultados electorales del 5 de julio se ha exacerbado.
TRATAREMOS De empezar por cómo se está dando la problemática al interior del PAN y que desencadenó con motivo de los resultados electorales del 5 de julio a resultas de la catástrofe que sufrió el partido azul en esas elecciones en las que fue barrido a nivel nacional por su tradicional contrincante, el Partido Revolucionario Institucional. Acto seguido viene la corrida que le dio el presidente Calderón al señor Germán Martínez, como presidente nacional de los azules.
DE INMEDIATO Y como consecuencia de la derrota electoral, surgió una sentida insubordinación en más ocho comités estatales del PAN y en contra de la dirigencia nacional pidiendo su remoción. Y para seguir con los problemas, ahora resulta que al primer panista del país y presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, se le ocurrió meter mano en el proceso electoral interno de su partido y entre todo el panismo nacional no encontró uno mejor para presidente nacional que al señor César Nava, quien por pura casualidad fue su secretario particular.
ESTO SIN LUGAR A dudas ya desató una lucha sorda al interior del partido azul, pues como en los mejores y viejos tiempos, el presidente de la república nombra al jefe de su partido. En este caso especial quedaron tirados en la pista políticos panistas de trayectoria, militancia y con representatividad que no se rendirán con mucha facilidad en su intento de llegar a la presidencia nacional de los azules. A esto se sumará el descontento de los comités estatales y consejeros que no podrán participar en la renovación de la dirigencia de los azules toda vez que el terrible "dedazo" ya ha sido dado por el primer azul del país que despacha en Los Pinos.
POR LO QUE Respecta a los señores del Partido de la Revolución Democrática las cosas les pintan ahora peor que nunca. Las "tribus" no descansan ni un día del año y el más mínimo punto de discusión es suficiente para enfrentarse y pegarse hasta con la cubeta. Por lo pronto una de las "tribus" ya descalificó al líder moral del PRD Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano. El fundador del PRD propuso proceder con las expulsiones pendientes (la de López Obrador y de otros dicientes perredistas) así como a la elección de un nuevo comité nacional perredista. A estas declaraciones el señor Antonio Ortega, hermano de "Chucho", la calificó de "mesiánica" y "caudillista" la propuesta de Cárdenas.
POR OTRA PARTE El diputado perredista González Garza sí está de acuerdo en que se discuta al interior del PRD la expulsión de Andrés Manuel López Obrador y tránsfugas, lo que coincidió con la propuesta de Cuauhtémoc Cárdenas. En otro escenario, Jesús Ortega, presidente nacional del PRD sostuvo que es más conveniente un borrón y cuenta nueva y olvidar las traiciones, veleidades e incongruencias de AMLO con su partido. Por otra parte, René Arce líder de las tribus de nueva izquierda en el Distrito Federal, también apoya la propuesta de Cárdenas para que sean expulsados del Sol Azteca sus infidentes.
LA REALIDAD Es que detrás de todo este debate al interior del PRD, subyace la figura de AMLO, que aun con todo su desgaste político sufrido desde 2006, sigue manteniendo una fuerte hegemonía al interior de las "tribus" perredistas, de las dirigencias estatales, distritales, delegacionales, de gobernadores, alcaldes, senadores y diputados que le deben a él la chamba que ostentan.
ENTRE TANTO La dirigencia del PRD no pueda resolver el "caso AMLO" que ya se convirtió en una espina atragantada en la garganta, el problema de "El Peje" seguirá gravitando por sobre la dirigencia nacional, por sobre sus líderes morales y por sobre los mismos fundadores del partido del Sol Azteca.
SEGÚN LOS ANALISTAS , esta espina atorada en la garganta del PRD, finalmente lo asfixiará y para 2012, el partido que aspiró a representar a la izquierda moderna de México, se colapsará en una división interna irreversible tal y como siempre ha actuado la izquierda a través de la historia de México en el Siglo XX: dividida, amorfa, sin sentido y sin liderazgo. Las "tribus" regresan a sus lugares de origen y sus pastores, como ha sido siempre, se perderán nuevamente vagando en el desierto.
COMO SE PODRÁ VER , las cosas no están nada fáciles para los de derecha ni para los que se ostentan como la izquierda mexicana.
