Siete personas - cinco policías y dos civiles- murieron hoy en una oleada de ataques registrados en la ciudad de Mosul, a unos 400 kilómetros al norte de Bagdad, informó una fuente del Ministerio de Interior iraquí.
Según la fuente, un agente del Departamento del Tráfico y un civil fueron asesinados en un ataque perpetrado por un grupo armado en un estación de autobuses al este de Mosul.
Asimismo, otros dos agentes del Tráfico fallecieron acribillados en dos agresiones armadas separadas en los barrios de Al Risala y Mosul Al Yedida, al sur de la ciudad.
Por otra parte, un policía perdió la vida en un ataque cometido por desconocidos en el área de Bab Al Tub, ubicada en el centro de Mosul, indicó la fuente, mientras que otro agente murió por la explosión de una bomba en la localidad de Al Qaiara, a unos 50 kilómetros al sur de Mosul.
La fuente indicó, además, que un presunto rebelde falleció cuando instalaba una bomba en el barrio de Al Refaq, situado en el norte de esa ciudad.
Asimismo, un agente de las fuerzas de seguridad a cargo de la custodia de instalaciones gubernamentales, y un civil resultaron heridos de gravedad por la detonación de un artefacto colocado por desconocidos en el coche en que se trasladaban las dos víctimas.
La provincia de Nínive, cuya capital es Mosul, está consideraba un feudo de los grupos de la resistencia iraquí y los combatientes de la red terrorista Al Qaeda.
