Tres muertos, entre ellos dos menores de edad, así como siete lesionados de gravedad y daños materiales superiores a los 30 mil pesos, fue el saldo que arrojó una trágica volcadura suscitada en el kilómetro 29 de la carretera 57, a la altura del ejido San Miguel, Ramos Arizpe.
Eran primos
Las personas que perecieron en el lugar de los hechos respondían a los nombres de Vicente Cancino Míreles, de 22 años de edad, Edgar Arturo Cruz Abrego, de 17 años de edad y Juan Carlos Abrego Morales, de 15 años de edad, los cuales perdieron la vida instantáneamente al salir proyectados de la camioneta en la que viajaban, cuando esta dio varias volteretas.
Aproximadamente a las 13:39 horas del día de ayer, automovilistas que circulaban con dirección a Saltillo, se detuvieron para auxiliar a las personas que se encontraban tiradas en el suelo.
En el vehículo viajaban 10 jóvenes, de los cuales solamente siete de estos lograron correr con suerte y salvar su vida.
Como presunto responsable de este funesto percance aparece Wilfredo Míreles Domínguez, de 16 años, quien conducía a exceso de velocidad, una camioneta Ford 1979, color rojo, con placas ES 0585, con rumbo a los Campos Suacedo, en el Municipio de Ramos Arizpe.
Sergio Javier Mireles Flores, de 14 años, quien viajaba en la caja de la camioneta mencionó que todos sus familiares y amigos pertenecían al equipo de futbol Real Santo Domingo, y que iban a jugar su primer partido de la temporada, que sería contra Los Coyotes, pero que solamente faltaban 15 minutos para que la justa comenzara, motivo por el que cual su primo oprimió todo el peso al acelerador del vehículo.
De acuerdo con la información proporcionada por los elementos de la Policía Federal Preventiva, la camioneta se desplazaba de norte a sur, a mayor velocidad de la permitida, lo que ocasionó que el conductor perdiera el control del volante hacia la derecha cuando pasaba una curva cerrada. Al intentar reincorporarse al camino, aparentemente una camioneta se le atravesó a su paso, acción por la que Wilfredo frenó sin conseguirlo, ya que la unidad comenzó a dar varias volteretas, hasta impactar una Ford 1978, color blanco, con placas ER 48 860, que estaba estacionada.
Amador Cancino Guerrero, de 78 años, salió de su casa para ver lo que había pasado, pero tremenda sorpresa se llevó al ver que uno de los futbolistas que habían salido disparados, era su joven sobrino.
Al lugar de los hechos acudieron elementos del Cuerpo de Bomberos y socorristas de la Cruz Roja, quienes se encargaron de brindar los primeros auxilios a los sobrevivientes de la tragedia, los cuales resultaron con fuertes lesiones, por lo que fueron trasladados de emergencia al Hospital Universitario, donde quedaron internados Antonio de Jesús Cancino, Míreles, de 16 años, Francisco Antonio Míreles Gómez, de 17 años, Adán Vásquez Leyva, de 19 años, José Iván y Luis Alexis Míreles Morales, de 16 y 13 años de edad.
El Agente del Ministerio Público, José Juan Morales Galindo y los oficiales del Servicio de Periciales de la Procuraduría de Justicia del Estado, acudieron para tomar conocimiento de los hechos. Los cuerpos fueron trasladados al Semefo para practicarles la necropsia de ley, que determine las causas de su muerte.
