Cuatro episodios le bastaron al lagunero Daniel “Chato’’ Noriega para ganarle al tapatío Francisco “Trompito’’ Márquez en la pelea estrella de la Función de Año Nuevo, celebrada en Gómez Palacio. (Fotografías de Ángel Padillan Ruvalcaba)
Daniel “Chato” Noriega le dio un baile a Francisco “Trompito” Márquez, al noquearlo al minuto dos y diez segundos del cuarto round, en la pelea estrella de la tradicional función de box de Año Nuevo, denominada “De Poder a Poder”, la cual se celebró anteanoche en el Gimnasio Municipal Luis L. Vargas de esta ciudad.
El “Chato” Noriega mandó a la lona al tapatío Francisco “Trompito” Márquez con un gancho de izquierda al plexo solar, después de haber dominado el combate en los tres episodios anteriores.
El primer asalto fue de estudio, sin que los contendientes se emplearan a fondo, en el segundo round el “Chato” Noriega tomó la iniciativa de la pelea y logró hacer sentir su poder, en el tercer episodio el “Trompito” Márquez logró nivelar las acciones, pero en el cuarto Daniel Noriega fue más contundente y consiguió vencer a su rival.
Al ver caído a su enemigo, el púgil lagunero subió a las cuerdas para festejar a lo grande su triunfo.
No esperaba noquearlo
Entrevistado al término del combate, Daniel “Chato” Noriega, el nuevo ídolo de La Laguna, se mostró agradecido con Dios por el triunfo obtenido, ya que no esperaba ganar por nocaut y se había preparado a conciencia para aguantar los diez rounds, a los que estaba pactada la pelea estelar de anteanoche en peso mosca.
Reconoció que batalló un poco con el “Trompito” Márquez, por ser un boxeador zurdo, sin embargo, logró vencerlo con un gancho de izquierda al plexo solar.
Señaló que después de esta victoria buscará una pelea por el Campeonato de América. “Dios dirá más adelante”, señaló el boxeador lagunero.
Ganó por decisión
La pelea semifinal estrella fue en peso supermosca y de revancha entre Gerardo Piñón y Antonio “Tony” Rodríguez, quienes habían sostenido un polémico combate en la función anterior del Gimnasio Luis L. Vargas, la cual ganó por decisión Gerardo Piñón.
“Tony” Rodríguez pidió revancha y anteayer tampoco pudo vencer a Gerardo Piñón, quien después de ocho asaltos volvió a ganar por decisión unánime.
Gerardo Piñón dominó la mayor parte de los episodios y en el séptimo mandó con un cruzado de derecha a la lona al “Tony” Rodríguez, quien logró levantarse con todo el pómulo izquierdo inflamado, sin embargo, el “orgullo lo sostuvo” y pudo concluir la pelea.
Cuatro nocauts
consecutivos
De la primera a la cuarta pelea de la noche se decidieron por la vía rápida, resultando atractivas para los asistentes a la tradicional función de box Año Nuevo.
La primera de ellas fue en peso welter, resultando ganador Javier “Coyote” Monreal, quien venció por nocaut técnico al minuto y 48 segundos del segundo round a Jesús Barraza, al cual derribó con un gancho de izquierda a la nariz. En el segundo combate de la noche, en peso supermosca, Óscar Badillo, el “Más Macho”, noqueó al minuto dos y ocho segundos del segundo episodio a Christopher Cuevas con un gancho de izquierda al hígado.
En la tercera pelea, en peso gallo, Ricardo Román le ganó en el primer minuto del quinto asalto a Carlos “Sonora” Hernández, al conectarle un gancho de derecha en pleito que dominó de principio a fin. En el cuarto combate, en peso welter, a Andrés Calixto Rey, el “Diamante Negro”, le bastaron dos minutos del primer round para noquear a Armando “Sonrisas” Mejía, con un contundente recto de derecha.
La velada boxística de Año Nuevo en el Gimnasio Luis L. Vargas respondió a las expectativas creadas, pero no faltó el “prietito en el arroz”, ya que fue hasta el quinto round de la tercera pelea de la función aparecieron las edecanes encargadas de anunciar cada episodio, ante la falta de éstas en los combates anteriores subieron al ring personas de ambos sexos a anunciarlos, en una clara falta de respeto al público asistente.