Visita oficial. El presidente Dmitry Medvedev y el presidente de la Confederación Helvética, Hans Rudolf Merz, pasan revista en Suiza.
Negociadores rusos y estadounidenses emprendieron en Ginebra la sexta ronda de reuniones para alcanzar un acuerdo sobre la reducción de arsenales nucleares estratégicos, que se espera pueda ser firmado antes de finalizar el año y que podrían prolongarse esta semana.
Las reuniones reservadas discurrirán sobre el tratado que sucederá al vigente START, que expirará el 5 de diciembre.
Rusia y Estados Unidos acordaron negociar un instrumento bilateral que reemplace el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START) y que fije entre 1,500 y 1,675 el nivel máximo de ojivas nucleares y entre 500 y 1,000 el de portadores que podrá tener cada país, pero en las pláticas han surgido desacuerdos.
La expectativa es que el anuncio del presidente de EU, Barack Obama, de renunciar al despliegue de un escudo antimisiles en Europa oriental, podría desbloquear el proceso y acelerar un acuerdo.
Rusia consideraba ese plan como una amenaza a su seguridad nacional, por lo que aplaude la decisión de Washington.
En reacción al anuncio de Obama, el Gobierno ruso tampoco desplegará armamento en su enclave de Kaliningrado.
Este asunto será abordado por los jefes de Estado ruso, Dmitri Medvedev y el presidente Obama, en la Cumbre del G-20.
