Los habitantes del estado de Nueva York son los más infelices entre los ciudadanos de Estados Unidos, según un estudio que publica el actual número de la revista Science y que sitúa a Luisiana como el lugar más feliz del país.
Los habitantes del estado de Nueva York son los más infelices entre los ciudadanos de Estados Unidos, según un estudio que publica el actual número de la revista Science y que sitúa a Luisiana como el lugar más feliz del país.
Nueva York se ha situado en el último puesto, el número 51, del ránking que han elaborado el economista Stephen Wu, del Hamilton College de Nueva York, y el británico Andrew Oswald, de la Universidad de Warwick en el Reino Unido, para saber qué lugares de Estados Unidos son los idóneos para conseguir la preciada felicidad.
El curioso estudio realizado por los expertos mediante el análisis de varias estadísticas situó al conocido como Empire State en lo más bajo de una lista, justo por detrás de sus vecinos de Nueva Jersey (50) y Connecticut (49), y al otro extremo de donde cayeron, además de Luisiana, Hawai (2) y Florida (3).
Los primeros diez puestos de la lista de la felicidad los completan Tennessee, Arizona, Misisipi, Montana, Carolina del Sur, Alabama y Maine, mientras que los ciudadanos más infelices también habitan los estados de Rhode Island, Massachusetts, Ohio, Illinois, California, Indiana y Michigan.
"Nos han preguntado varias veces si esperábamos que estados como Nueva York o California consiguieran una posición tan baja en el ránking de la felicidad, y puedo decir que sólo estoy un poco sorprendido", reconoció Oswald.
El experto aseguró que la causa de esas posiciones es que hay "muchas personas que los ven como lugares maravillosos para vivir, deciden mudarse ahí y lo que consiguen es una mayor congestión, que los precios de la vivienda suban y que la profecía no se cumpla".
Los expertos han incluido en la lista de estados a la capital del país, Washington, que se ha colocado en el puesto 36 de un llamativo catálogo con el que, según sus autores, se ha conseguido saber cuáles son los mejores y también los peores lugares para vivir en Estados Unidos.
"Lo importante de este estudio es que hemos podido mirar bajo la superficie de la vida americana y descubrir cuáles son los patrones mediante los que los estadounidenses evalúan su satisfacción y felicidad desde Alabama a Wyoming", aseguró Oswald, quien destacó lo "novedoso" del análisis.
Para elaborar la lista, los autores utilizaron los datos de una encuesta realizada a 1.3 millones de estadounidenses entre 2005 y 2008 por del Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos y en la que se preguntaba sobre la salud y el nivel de satisfacción general de los encuestados.
Esa información se completó con otros indicadores obtenidos por investigadores de la Universidad de California Los Ángeles (UCLA), que estudiaron varios factores por estado, desde la calidad del aire o el nivel de criminalidad hasta la presión fiscal, el coste de vida o la calidad de la educación.
"Queríamos estudiar si la satisfacción que las personas dicen experimentar en su vida es un dato fiable que se adecúa a datos reales, como las horas de sol o la calidad del aire, de sus estados. Y sí, se adecúa", añadió el economista británico.
Oswald aseguró así que ahora se tiene que 'prestar atención a las respuestas que los seres humanos ofrecen cuando se les pide que evalúen su nivel de satisfacción en una escala numérica' y que ese tipo de encuestas son 'muy valiosas' para que los Gobiernos las utilicen 'para diseñar sus políticas económicas y sociales'.