La Casa Blanca negó hoy el envío de vacunas para inmunizar a los prisioneros en Guantánamo contra el virus A/H1N1, causante de la influenza humana, a pesar de que el Pentágono confirmó el despacho.
'No hay vacuna en Guantánamo y no hay vacunas en camino a Guantánamo' dijo el vocero presidencial Robert Gibbs.
Gibbs evitó desmentir la aseveración de voceros del Departamento de Defensa en el sentido de que la vacuna sería despachada a esa prisión militar en las próximas semanas.
Por su parte, Bryan Whitman, vocero del Pentágono, dijo a la cadena de noticias Fox que el Departamento de Defensa tiene la obligación de cuidar de las personas bajo su custodia 'y la tomamos muy en serio'.
Whitman explicó que la vacuna será primero puesta a disposición de las tropas en combate, después a las fuerzas en activo, personal médico, prisioneros y luego contratistas.
Cuestionado si la Casa Blanca habría detenido el envío de vacunas a Guantánamo, Gibbs desestimó la pregunta. 'No, porque no hay nada en camino', dijo.
La revelación sobre el envío se produjo en medio de una escasez de vacunas contra el virus A/H1N1, situación que a decir del propio Gibbs, ha provocado la frustración del propio presidente estadunidense Barack Obama.
Por separado, el Centro para el Control de Enfermedades (CDC) aseguró que Estados Unidos no donará vacunas a otros países hasta que la producción sea suficiente para asegurar el suministro interno.
Funcionarios de la dependencia revelaron que hasta ahora se han puesto a disposición del público 31 millones de dosis de esta vacuna, y que esperan que 10 millones de dosis más arriben cada semana a partir de ahora, hasta sumar 195 millones.
