El también presidente de la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA) y ex presidente del PAN, señaló que sería inmoral el que su partido pretenda medrar con esas acciones.
En el PAN no estamos exentos de la narcopolítica como ningún partido lo está, admitió el ex presidente de ese instituto, Manuel Espino Barrientos, quien a raíz del operativo en Michoacán consideró innecesario “judicializar la contienda electoral” de este año.
Incluso, dijo que ningún partido puede emitir juicios en torno a ese tema porque, reconoció, “es como escupir para arriba”.
Para los detenidos en el operativo --alcaldes y funcionarios de Michoacán--, pidió “un voto de confianza”, hasta que haya pruebas de su culpabilidad y dijo que de su parte, hay comprensión en torno a la reacción que tuvieron los partidos de oposición por estas detenciones.
El también presidente de la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA) y ex presidente del PAN, señaló que sería inmoral el que su partido pretenda medrar con esas acciones.
Espino fue convocado para participar en el V Congreso Internacional Víctimas del Terrorismo al cual también fue invitado el presidente Felipe Calderón.
El ex presidente del PAN, hospedado coincidentemente en el mismo sitio de la prensa mexicana, dijo que a la narcopolítica hay que combatirla, pero no judicializar la contienda electoral:
“Un partido político no tiene ni voz y menos autoridad para emitir juicios respecto de otros partidos políticos”.
Al asumir su rol de crítico del gobierno federal y de la dirigencia panista, Espino dijo: “Yo quisiera saber qué opinan muchos ciudadanos de los casos en los que ha habido panistas o gobiernos panistas involucrados en el crimen organizado, de manera voluntaria o involuntaria. No estamos exentos de esa posibilidad”, admitió.
El ex presidente panista dijo comprender el disgusto de los partidos de oposición con la aplicación de operativos como el de Michoacán y expresó: “Yo espero que no haya intencionalidad política o electoral en los operativos que se están realizando, confío en que no es así. Es comprensible la actitud de la oposición porque resulta un tanto, cuanto, extraño que en plena contienda electoral sucedan estas cosas”.
El presidente de la ODCA dijo que no sería justo considerar a quienes han sido detenidos en Michoacán, alcaldes y funcionarios, como criminales, “porque hasta donde tengo entendido solamente están arraigadas, sujetas a una investigación y cuando un juez resuelva en definitiva cuál es su situación podremos entonces opinar si eran o no criminales, pero por lo tanto hay que darles el voto de confianza y por lo menos esto no se utilicen o por lo menos mi partido, no lo utilice sacarle provecho, sería inmoral medrar con un caso que está en manos de la justicia y que no está en definitiva resuelto”.
Sobre la campaña emprendida por el presidente del PAN, Germán Martínez, Espino dijo respetar “su estilo”, pero acusó que “no hay una estrategia definida institucionalmente ni por CEN ni por el Consejo Nacional, esa es una estrategia personal de Germán Martínez y la respeto. Es su momento –resumió– y hay que ver qué resultados le da”.
Dijo que los panistas deben ser “muy cuidadosos”, pues al ser el partido en el gobierno no se debe “esterilizar la política cerrando puertas a un diálogo respetuoso. El partido gobernante es el más obligado a la tolerancia, a la apertura, a la paciencia, a recibir con ponderación, con serenidad la crítica de la oposición”.
Incluso, enfocó sus señalamientos también hacia el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, quien el lunes pasado dijo que habrá respuesta de las críticas al gobierno para los partidos políticos:
“No veo en esas palabras la expresión, ni ideológica, ni política, ni programática de Acción Nacional. No la veo porque al secretario de Gobernación no le corresponde proponer debates, no le corresponde amonestar a los partidos, no le corresponde advertirles que van hacer increpados por parte del gobierno, no le corresponde provocar este tipo de situaciones, creo que el secretario de Gobernación debiera ser el funcionario público de más mesura, de más serenidad, de más apertura, de más respetabilidad frente a los partidos políticos”.
Al término lanzó un reto a Martínez al señalar que él dejó, como dirigente, una bancada de 207 legisladores en la Cámara de Diputados, “y espero que él, por lo menos, entregue una de 208”.
