A medias. Debido a que los trabajos de rehabilitación no terminaron a tiempo, los estudiantes y albañiles convivirán por un buen tiempo.
En medio de cerros de arena, piedras y sin barda perimetral, Esteban y Federico, alumnos de la Escuela Primaria Felícitas Cordero, regresaron a clases el día de ayer.
Y es que los trabajos de rehabilitación del programa federal "Mejores Escuelas", no terminaron a tiempo. En él se contempla la reparación total de los sanitarios, del patio cívico y de la barda perimetral.
Aunque los trabajos iniciaron el 25 de julio, el tiempo no fue suficiente. "No tenemos fecha de entrega", dijo el director del plantel, Juan Manuel Hernández.
Aunque a las autoridades les preocupa el retraso, a los pequeños no. Pues más allá de jugar entre el material de construcción, lo que les angustia es levantarse temprano, "me tuvo que despertar mi mamá porque me había acostumbrado a levantarme a las diez", dice sonriente Esteban.
El director por su parte, comentó que este retraso ha convertido en blanco fácil a la escuela para los ladrones, "pues sin barda se pueden meter más fácil, ya nos robaron la bomba de un aparato de aire y a los albañiles parte del material... sólo resta esperar", puntualizó.
ESTEBAN
Estudiante