Bautizar toros con el nombre de "Notario", en honor de la familia Martínez Urquidi, suele guardar algo especial para sus lidiadores.
Especialmente cuando los bureles saltan al ruedo de la Plaza México. José Arturo Jiménez Mangas, propietario de la ganadería de San José, envió un ejemplar de nombre "Notario" a la Monumental de Insurgentes que sirvió para que el español Enrique Ponce cortara el rabo número 121 en la historia del coso capitalino.
Como un reconocimiento al dueño de la dehesa de Los Encinos, Eduardo Martínez Urquidi, quien también es el representante de la notaría número 56 en el Distrito Federal. Hace más de 25 años, el 23 de mayo de 1983, el hierro de San Martín, propiedad de Pepe Chafick lidió un "Notario" en la México, astado que fue indultado por el desaparecido torero Antonio Lomelín.
Aquel astado también fue bautizado por el criador de San Martín en honor de un miembro de la familia Martínez; se trató de don Adolfo, padre del propietario del hierro de Los Encinos.
"Ya le dije a Eduardo que voy a patentar ese nombre, porque sí trae mucha suerte", bromeó el ganadero, quien también resultó triunfador en los festejos del sexagésimo tercer aniversario de la Plaza México. "Tardé un poco en abandonar la Plaza y cuando iba a tomar la puerta de salida vi la placa donde están los nombres de los toros a los que se les han cortado rabos y sentí mucha satisfacción de ver que ya estaba en ésta el nombre de 'Notario', que inmortalizó el maestro Ponce". Fue que hace varios meses la casa poderdante de Enrique Ponce escogió el encierro que lidiaría el esteta español para su compromiso del 8 de febrero.