Viento en popa. En México hay 24 editoriales dedicadas específicamente a la publicación de libros para niños y el mercado se muestra activo a pesar de la crisis.
MÉXICO, DF.- Los niños de hoy poco tienen qué ver con los infantes de las generaciones pasadas; tampoco se compara la oferta editorial que tenían hace 20 ó 30 años, con las novedades literarias que a cada tanto aparecen en librerías. Los pequeños de nuestro tiempo se apasionan por los videojuegos, la Internet, buscan historias más amplias, con mundos complejos y personajes atractivos.
Las historias de niños que buscan el país de Nunca Jamás, cerditos valientes que enfrentan al lobo, niños perdidos en parajes embrujados o las desventuras de un patito feo, no han pasado de moda entre los chicos menores de cuatro años que aún se dejan seducir por la fantasía; los preadolescentes de 9, 10 u 11 años exigen algo más, buscan historias más cercanas a la realidad que viven o las otras realidades que abundan en sus computadoras, en las películas o en sus aparatos de video.
Para Doris Bravo, editora de divulgación de Grupo Planeta, en la preadolescencia "los niños empiezan a buscar las temáticas que son similares a lo que ellos viven en la escuela, el Internet o los programas de televisión; pero no ocurre lo mismo con los pequeñitos, ellos se siguen fascinando con los cuentos clásicos, su mundo sigue siendo tan mágico como el de los niños de hace mucho tiempo".
La editora reconoce que los intereses de los niños por los medios tecnológicos hablan de un mundo virtual que define gusto y aficiones.
Ante esa exigencia, los autores y los editores emprenden nuevos proyectos. Miriam Martínez, del Fondo de Cultura Económica, asegura que hay muchos autores que se están internando en una temática más actual, como es el caso de los escritores europeos que tratan el tema de la homosexualidad, madres solteras o madres promiscuas.
Martínez afirma que hay avances en el mundo real de literatura y vida cotidiana que se reflejan en la novela no sólo para jóvenes sino para niños, pero en México "el paso es más lento, tenemos a autores que se atreven y están rompiendo paradigmas de la literatura infantil mediante la forma, un ejemplo: Carmen Leñero con su libro Emilio y El Viaje sin Tesoro, que es un texto complejo y de experimentación".
Cambian las plataformas de lectura, la Internet ha transformado las vías de comunicación y el acceso al conocimiento entre los niños mexicanos sustancialmente.
'Harry' hace historia
"Los fenómenos editoriales comenzaron con Harry Potter que es un parteaguas que nadie puede negar y que llevó a los niños a historias de más extensión y complejidad; pero por otro lado están las Bibliotecas de Aula y Escolares que incidieron en el desarrollo de nuevos proyectos editoriales, alentaron el surgimiento de pequeñas editoriales que apostaron por libros de no ficción que antes llegaban de España; ahora experimentan con música, poesía y libros de todo tipo de historias", señala Miriam Martínez, del Fondo de Cultura Económica.
Andrea Fuentes no descarta el incremento de libros para niños en los últimos años, pero lo atribuye a un crecimiento que viene desde hace unos 20 ó 25 años debido a un fenómeno que comenzó en Francia en los 60 y que tiene que ver con las transformaciones de la educación.
"Hubo toda una concepción de modificar los elementos con los que tradicionalmente se había educado y eso empezó a generar libros específicamente para ese mercado".
La crisis económica será un freno para las publicaciones de novedades para niños y jóvenes; el FCE publicará entre 20 y 25 títulos en 2009, aun cuando en 2007 publicó cerca de 40.
Números
Las cifras del negocio editorial:
⇒ Cuatro millones 110 mil 342 libros importados, que representan 21.5% del total.
⇒ Un millón 224 mil 252 libros exportados, que representan el 8.2% del total.
⇒ Se vendieron 13 millones 678 mil 736 libros.
⇒ En 2007 se incrementó el 7.1% en títulos y 12% de facturación.
