Atacan escuela. Niñas afganas reciben tratamiento médico en un hospital tras ingresar con síntomas de envenenamiento en la provincia de Kapsia.Más de cien escolares afganas fueron hospitalizadas tras un aparente ataque con gas contra el colegio.
KABUL, AFGANISTÁN.- Once dinamiteros suicidas atacaron ayer edificios del Gobierno en el Este de Afganistán y provocaron tiroteos que dejaron por lo menos 20 muertos y tres soldados estadounidenses heridos, dijeron las autoridades. Los soldados norteamericanos y afganos liberaron a 20 rehenes que habían tomado los insurgentes.
El ataque comenzó alrededor de las 10 de la mañana, cuando un atacante suicida enfundado en una túnica atacó la sede del gobernador en Khost, una ciudad Oriental sobre la frontera con Pakistán donde opera una importante base estadounidense.
A esa explosión sucedió poco después la explosión de un automovilista suicida, dijo Wazir Pacha, vocero del jefe de Policía provincial.
Fuerzas estadounidenses que asistían a una reunión en las cercanías respondieron los ataques y mataron a un número no precisado de milicianos.
Los residentes de Khost corrieron a refugiarse de las explosiones y tiroteos que siguieron hasta las 5 de la tarde. Por lo menos murieron 11 insurgentes y otras nueve personas, incluyendo policías y civiles, dijo el ministerio de la Defensa.
Un vocero talibano, Zabiullah Mujahid, dijo que 30 dinamiteros suicidas atacaron los edificios del Gobierno.
En los últimos meses los milicianos han llevado a cabo ataques múltiples y analistas militares dicen que la creciente complejidad de los ataques en Afganistán es resultado del entrenamiento de milicianos paquistaníes y combatientes de Al Qaeda.
El ataque de Khost se produce en momentos en que el presidente estadounidense Barack Obama busca imprimir su sello en la guerra designando un ex general como embajador y reemplazando al comandante militar supremo en Afganistán. Karl Eikenberry presentó ayer sus credenciales al presidente Hamid Karzai.