Los jefes de familia tienen temor por la seguridad de los pequeños que reciben clases en el jardín de niños Sebastián Lerdo de Tejada, donde se vino abajo el techo de un aula en proceso de construcción.
Se cae techo en un jardín de niños de Lerdo; no se reportan lesionados.
La supervisión en las obras que se llevan a cabo en planteles educativos sigue dando de qué hablar, pues en esta ocasión se vino abajo el techo de un aula en proceso de construcción en el jardín de niños Sebastián Lerdo de Tejada, de esta ciudad.
El domingo de la semana pasada, la losa de concreto y casetón se cayó sobre los muros que la sostenían y desde entonces, una cinta amarilla rodea los escombros, pues el responsable de la obra no ha respondido por los daños y la Subsecretaría de Educación ni siquiera ha acudido al lugar para conocer el incidente, dijeron madres y padres de familia.
Aun con la impresión de lo ocurrido, se dijeron afortunados porque esto no ocurrió cuando sus pequeños estaban en clases o jugando durante el recreo, aunque están inconformes y ahora exigen que el arquitecto contratado les regrese el dinero que se le pagó.
Con la cuota de cien pesos que cada ciclo escolar aportan los jefes de familia para mejoras en el plantel, se pagó la construcción del aula, cerca de 27 mil pesos, una obra de gran necesidad porque uno de los tres grupos de tercero no cuenta con salón de clases y cada vez tienen una mayor demanda.
Gerardo Castañeda, uno de los padres de familia, cuestionó la calidad de las obras y dijo que a esto pudiera deberse que se haya venido abajo, “creo que porque no utilizaron los materiales adecuados o quitaron la cimbra antes de tiempo”, comentó.
Mayra García y Pamela de la Fuente dijeron que el arquitecto que la directora contrató para construir el aula es de apellido Estala, a quien le están exigiendo que regrese el dinero y por lo cual, piden que intervengan las autoridades educativas.
Los jefes de familia consideraron que éstas deberían poner una mayor atención hacia la calidad de las obras que se llevan a cabo en los planteles, pues se pone en riesgo la vida de sus hijos.