Pacquiao, no acepta la propuesta del equipo del púgil estadounidense de hacerse pruebas antidopaje con la modalidad que se utiliza en las competiciones olímpicas. (EFE)
Si el púgil filipino Manny Pacquiao ha mostrado al mundo entero su clase y determinación frente sus rivales en el cuadrilátero, ante la polémica surgida con las pruebas de control antidopaje para su posible pelea contra el estadounidense Floyd Mayweather ha sido todavía más "contundente".
No aceptará más pruebas que las que determine la Comisión Atlética de Nevada, donde está previsto, en principio, que se dispute la histórica pelea contra Mayweather, al que, por otra parte, piensa denunciar ante la justicia por difamación.
Pacquiao, que había aceptado la fecha del 13 de marzo para enfrentarse al invicto Mayweather dentro del peso welter, no acepta la propuesta del equipo del púgil estadounidense de hacerse pruebas antidopaje con la modalidad que se utiliza en las competiciones olímpicas.
Aunque toda la expectativa se centra en lo que representará el combate Pacquiao-Mayweather, un acontecimiento que se presenta como el más grande desde los tiempos memorables de los legendarios Sugar Ray Leonard y Tommy Hearns, cuyas peleas se realizaban al aire libre, nada está todavía decidido.
Pacquiao ha dejado muy claro y los organizadores ya lo saben que no subirá más de categoría, es decir que su peso tope será el welter (147 libras ó 66.6 kilos).
Su promotor, el veterano Bob Arum, dio a conocer ayer, domingo, lo que consideró la última propuesta con relación al asunto del control antidopaje para intentar salvar la pelea.
De acuerdo con la propuesta de Arum, la Comisión Atlética de Nevada tendrá la última palabra sobre cuántos exámenes y cuándo se realizarán para el combate.
Mientras, los preparativos siguen en Las Vegas y de momento lo previsto es que haya tres exámenes de sangre, pero ninguno 30 días antes de que se dispute la pelea, al menos que la propia Comisión Atlética de Nevada decida otro tipo de actuación en la reunión que va a mantener el próximo enero.
Arum fue categórico cuando dijo que el grupo del campeón filipino no va a aceptar otra propuesta que esté fuera de la última que ellos han presentado.
La nueva posición de Arum es todavía más dura que la manifestada previamente por otras personas del equipo de Pacquiao en el sentido de que podría negociarse sobre los exámenes de sangre si no los realiza la agencia antidopaje de Estados Unidos y en los últimos días previos a la pelea.
Ni el director de la Comisión Atlética de Nevada ni los representantes de Mayweather han respondido de manera oficial a la última propuesta presentada por Arum.
Fuentes cercanas a ambas partes declararon a EFE que no hay muchas opciones en cuanto al asunto de las pruebas antidopaje, dado que si Pacquiao no negocia y sólo establece su posición, entonces la solución es aceptarla o rechazarla.
Todos los demás aspectos relacionados con la pelea fueron resueltos antes, pero la "sorprendente" disputa sobre los intentos del equipo de Mayweather de introducir rigurosos exámenes de sangre en el boxeo profesional por primera vez parece reducir las posibilidades de que se dispute el combate.
Mayweather, de 32 años y con marca perfecta de 40-0, con 25 triunfos por k.o., volvió a los cuadriláteros para enfrentarse al mexicano Juan Manuel Márquez, al que dio una cátedra de boxeo.
Pero Pacquiao, que también ganó a Márquez, es muy superior al púgil mexicano y Mayweather Jr. sabe que será sin discusión el rival más difícil al que le toque enfrentarse si al final se concreta la pelea, que sólo se hará si se aceptan sus "condiciones".
Pacquiao se ha convertido en un púgil que no tiene nada que ver con el resto de los profesionales, su boxeo y personalidad se desarrolla a otro nivel, al menos por las dos demostraciones espectaculares que dio durante el año 2009.
No le bastó con 'retirar' al legendario Oscar De La Hoya, sino que también 'demolió' al británico Ricky Hatton y castigó con dureza al puertorriqueño Miguel Cotto para arrebatarle el título del peso welter, versión Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
El mundo el boxeo es consciente de que la pelea entre Pacquiao y Mayweather Jr. es clave para inyectarle a este deporte la dosis de vitalidad que necesita en tiempos de crisis.