ISLAMABAD.- Los milicianos del Talibán dijeron el lunes que su acuerdo de paz con el gobierno pakistaní carece de valor, luego que las autoridades usaron helicópteros y artillería contra escondites de guerrillas islamistas que buscan fortalecer su control de la zona fronteriza.
Un colapso del pacto casi seguramente complacería a funcionarios del gobierno estadounidense, que han presionado a Islamabad para que tome medidas más enérgicas contra los extremistas que amenazan la estabilidad de Pakistán y a las fuerzas estadounidenses y de la OTAN en la vecina Afganistán.
El presidente Asif Ali Zardari llamó a un mayor apoyo extranjeros a Pakistán para evitar el peligro de que su arsenal nuclear caiga en manos de al-Qaida y sus aliados.
En otro indicio de la creciente preocupación occidental, el primer ministro británico Gordon Brown estaba por llegar a Pakistán para conversaciones sobre diversos temas, incluyendo la cooperación contra el terrorismo internacional, dijo la embajada británica.
Zardari dijo además que la inteligencia pakistaní pensaba que Osama bin Laden — que recientemente recibió una oferta de refugio por extremistas en el área cubierta por el pacto — pudiera estar muerto, pero dijo que no existía evidencia de ello.
"Pudiera estar muerto. Sin embargo, eso se ha dicho antes", dijo Zardari a un grupo de reporteros. "Es algo aún entre los hechos y la ficción".
Las presiones sobre el pacto crecieron el domingo, cuando las autoridades enviaron soldados apoyados por artillería y helicópteros artillados a atacar posiciones del Talibán en el Bajo Dir, una región cubierta por el acuerdo.
Fuerzas paramilitares mataron a 20 presuntos extremistas el lunes y un total de 46 habían muerto desde que comenzó la operación, dijo el ejército.
Un vocero del Talibán en su bastión en el Valle de Suat dijo que la operación era una violación del pacto y dijo que sus milicianos estaban en alerta y esperando a ver si el clérigo que medió en el acuerdo lo declaraba inválido.