EL ÁNIMO PODEROSO Y EL NECESITADO
¡Te necesito - le dijo el Necesitado al Ánimo poderoso -, ya que siento que me faltan fuerzas para realizar lo que tanto quiero!
¡No creo que en realidad carezcas de la fuerza necesaria, igual que a nadie le faltan fuerzas cuando abrigan ardientes deseos en su corazón!, - le contestó el Ánimo poderoso. Por ejemplo: ahora me llamas porque te crees débil, pero no lo eres, ya que me exiges con poderosa insistencia para que acuda en tu ayuda.
¡No te das cuenta - le dijo el Ánimo poderoso -, que te detienes por la simple razón de que permites que pensamientos viles y cobardes se apoderen de tu alma! ¿Qué no me hablabas de tus planes y hasta tu pecho se hinchaba de entusiasmo y alegría? ¿No me decías que tu sangre entusiasta corría por tus arterias como ríos caudalosos?
¡Qué pena - siguió hablando el Ánimo poderoso -, verte ahora como un ratoncito tembloroso acorralado por un gato! Te pareces más a una lombriz asustada y dejas de lado el hecho contundente de que eres el rey de la tierra.
¿Qué hago - le preguntó el Necesitado? Es muy simple, contesto su amigo: toma conciencia de que eres una persona y que tu cerebro es la maquinaría más perfecta y evolucionada que existe en el universo. Cae en la cuenta, que todo lo que necesitas es comportarte como un valiente y que debes mostrarte ante los demás, de una manera ejemplar. Si tu conducta es de valiente, terminarás sintiendo que la valentía inunda cada una de las células de tu cuerpo. ¡Perfecto - le respondió el Necesitado!
A veces no sé qué hacer y me mantengo cavilando en mis dudas - le dijo el Necesitado. ¡Malo, muy malo - opinó el Ánimo poderoso. Las cavilaciones enloquecen y acobardan, y la gente afirma que "¡la duda mata!" No caviles, no supongas, no tiembles ante los enemigos de paja. ¿No sabes qué hacer?: balbuceante pregunta. ¿Qué no sabes que la vida está llena de oportunidades? ¡Métete de lleno en la vida!: cientos de actividades ofrecen brillantes oportunidades, y hasta actividades que al orgulloso enfermo le parecen pequeñas, ofrecen un intenso interés.
¡Mira, le siguió hablando el Ánimo poderoso: detén tu desbocado pensamiento, haz a un lado tus eternas dudas, y en un acto de osadía empieza a actuar! La acción dará pie a provechosos pensamientos; la acción será tu infalible guía. No hay mejor comienzo que el empezar aunque sea con un solo paso, y la acción será superior maestra que el pensamiento. ¡Te entiendo - le contestó el Necesitado! ¡Y además cuentas con una ventaja enorme - le dijo el Ánimo poderoso!: como estás comenzando una nueva actividad, o estás perseverando en una actividad que ya ejerces, pero que ahora la emprendes con ánimo de guerrero, recuerda lo siguiente: mientras estemos haciendo algo y no sintamos que ya lo dominamos todo, tu corazón siempre estará agradecido. Tus duros afanes se verán impulsados por el agradecimiento que siempre tu corazón estará sintiendo gracias a los pequeños o grandes avances que poco a poco irás obteniendo. Si no eres fatuo y vanidoso, ese agradecimiento siempre lo sentirás mientras vivas. ¡Con esto que me dices me animas enormemente - le respondió el Necesitado!
¡Cuando no estoy inspirado me paralizo y no sé qué hacer - le dijo el Necesitado a su amigo! ¡Es que para actuar no necesitas de la inspiración - le contestó el ánimo poderoso! Esto de la necesidad de estar inspirado, constituye uno de los engaños más peligrosos para los hombres - continúo hablando el Ánimo poderoso-. Si observas con cuidado, te darás cuenta que las personas responsables y de éxito jamás hablan de la inspiración. ¡Se ponen a trabajar, y punto!
¡Prohíbete hablar de inspiración - continúo su amigo -, y en su lugar, empieza a trabajar sin inspiración alguna! ¡Te imaginas, un herido grave que requiere urgentemente de una intervención quirúrgica, y que el cirujano en presencia del herido y familiares, diga: esperemos que me llegue la inspiración para poder operarlo! ¡O el caso de una madre soltera o viuda que tenga que darles de comer a su hijo de un año, y piense: sé que mi hijo tiene que comer de inmediato, así que esperaré a que me llegue la inspiración para empezar a ver dónde busco comida o ayuda! ¡Sería desastroso - le respondió el necesitado!
Critilo sabe que todo lo anterior es cierto, y que lo que más tenemos que cuidar es nuestro Ánimo, pero siempre y cuando estemos conscientes que "la acción es lo decisiva donde quiera".