Líderes en salud Salud ENFERMEDADES NUTRICIÓN ESPECIALISTAS

¿Para qué nos casamos?

Hay a quienes el casamiento los destruye.

Hay a quienes el casamiento los destruye.

EL UNIVERSAL.

Algunas mujeres presentan cambios de humor debido a un malestar que se da días antes de que la regla aparezca; se llama síndrome premestrual.

La feliz pareja llega a la iglesia para las pláticas prematrimoniales.

La primera pregunta la contestan fácil: ¿por qué están aquí? “porque queremos casarnos”, pero la respuesta de la segunda refleja problemas en el matrimonio ¿por qué se quieren casar? Porque nos amamos.

Muchas parejas se casan poniendo como garantía el amor que sienten, otros lo hacen por evitar la soledad, hay quienes sucumben por las presiones sociales y familiares, otros por conveniencia económica sin tomar en cuenta sus sentimientos, por querer tener hijos o estar embarazados. Algunos dicen que el motivo es lo de menos mientras se “siente cabeza”.

Pocas personas asumen el matrimonio como parte de su proyecto de vida. Culturalmente estamos condicionados a que el matrimonio sirve para conseguir todo lo anterior, por ello lo vemos como un medio de obtención. El problema llega cuando nos damos cuenta que el amor no es suficiente cuando la pareja no piensa igual a nosotros sobre no tener hijos, los objetivos de trabajo, las expectativas profesionales o lugar de residencia.

¿Proyectar qué?

La vida no puede planearse con fechas y horas, programar cuando nos vamos a casar suele resultar inútil. Lo que debemos hacer antes de decidir casarnos es tener un plan de vida, propio y de pareja.

Muchos piensan que esto no incluye más que el aspecto laboral pero conlleva también nuestra visión de la vida, la misión que desarrollamos y los objetivos que buscamos en nuestras familias de origen, en la pareja, la profesión , el trabajo, la descendencia y procreación, el grupo de amigos, expectativas financieras y sociales, culturales, espirituales, religiosas, y hasta de salud.

Solemos dar por hecho muchas cosas y caemos en errores fatales, por ejemplo, el único tema financiero es si se casarán por bienes separados o mancomunados, pero difícilmente se establece quien administrará qué, cuánto tiene cada uno o cuánto darán en conjunto.

Los matrimonios exitosos no se basan sólo en el amor, se basan también en el respeto, la lealtad, la solidaridad, la comprensión, la complicidad, la libertad y el cumplimiento de los acuerdos. Dos personas con proyectos de vida independientes que construyen a partir de esto, uno en común hacen funcionar su vida pareja.

¿Es para todos?

Hay a quienes el casamiento los destruye. Casarse es una opción que existe como forma de vida, pero no es la única a la que tenemos acceso. Si alguien es obligado al matrimonio seguro será tan infeliz como quien se casa por miedo a la soledad ya que el fantasma del “que no me deje” le rondará toda la vida.

Llegar al matrimonio debe ser una elección que nos de la posibilidad de crecer al lado del otro y de lograr nuestros objetivos individuales y comunes, que aderezado con amor y pasión nos permite perdurar en él.

Leer más de Líderes en salud

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Líderes en salud

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Hay a quienes el casamiento los destruye.

Clasificados

ID: 423333

elsiglo.mx