Capacitación. Policías afganos en la ceremonia de finalización de un entrenamiento especializado llevado a cabo por las fuerzas de la OTAN.
LONDRES, INGLATERRA.- Al menos 14 personas murieron por la explosión de dos bombas en el Sur de Afganistán, en un incremento de la violencia a la población en vísperas de las elecciones presidenciales.
Tres niños de entre 8 y 12 años murieron cuando jugaban a la orilla de la carretera, en la provincia de Kandahar, con una bomba que explotó.
El otro atentado se registró en el distrito de Gereshk, en la provincia de Helmand, donde un artefacto colocado a la orilla de la carretera destruyó un vehículo que transportaba a una familia, una niña de seis años sobrevivió a la explosión.
Funcionarios de la localidad indicaron que militantes del Talibán están "plantando" este tipo de bombas en las principales carreteras del Sur del país.
De acuerdo con estadísticas recientes de la Organización Unida para Derrotar Dispositivos Explosivos Improvisados, con sede en EU, el número de atentados con bomba se incrementó a 828 el mes pasado, el más alto de la guerra y más del doble en comparación con julio de 2008. En este tipo de ataques la mayoría de las víctimas fueron civiles.
El Sur de Afganistán es el centro de la insurrección liderada por el Talibán, este año fueron desplegadas miles de tropas estadounidenses para intentar revertir los avances de los rebeldes.