Reunión. El nuevo secretario del Tesoro de EU, Timothy Geithner, durante una rueda de prensa tras el encuentro de los ministro de Economía del G-7 en Roma, Italia.
La cumbre de los ministros de Economía del G7 (los siete países más industrializados del mundo) concluyó ayer con un llamamiento de la Presidencia italiana a la creación de unas "nuevas reglas" que den lugar a "un nuevo orden económico mundial" respetuoso con el sistema capitalista.
La reunión, que hizo mucho hincapié en la necesidad de sanear el sistema bancario internacional, terminó con un llamamiento a un nuevo sistema legal compartido por todos los países que impida una crisis económica como la actual.
El comunicado final de la reunión también cita como una de sus prioridades impedir las "medidas proteccionistas" para que no surjan nuevas barreras al comercio internacional y le suma un llamamiento a una "rápida y ambiciosa conclusión" de la Ronda de Doha.
El proteccionismo había estado en boca de todos durante toda la semana a causa de la cláusula "buy american" (comprar productos americanos), incluida en el plan de estímulo estadounidense, que finalmente quedó diluida en la versión aprobada el viernes por el Congreso de EU.
El nuevo secretario del Tesoro estadounidense, Timothy Geithner, que acudía a su primera reunión del G7, no dio nuevos detalles sobre el plan de estímulo financiero, pero subrayó la "velocidad" con la que la Administración del nuevo presidente de EU, Barack Obama, ha tomado decisiones para sortear la crisis.
Geithner también se refirió en su intervención ante la prensa a unas "reglas globales más fuertes", ya que la falta de regulación de los mercados financieros en EU ha sido el origen de la crisis económica.