La Asociación Lagunera de Periodistas (ALPE) exige que se esclarezca el homicidio del periodista duranguense Carlos Ortega Melo Samper, cometido a principios de este mes en el poblado Santa María del Oro, Durango.
“El crimen debe investigarse y llegar hasta al fondo caiga quien caiga, ya que se trata de una grave violación a la libertad de expresión y un atentado a los derechos humanos”, dijo Carlos Padilla Muñoz, presidente de la organización en la Comarca Lagunera.
Lo más grave de este atentado es que el propio comunicador señaló, poco antes de su muerte, como responsables de su seguridad al alcalde de esa comunidad y al agente del Ministerio Público.
Padilla Muñoz censuró y condenó en forma enérgica este atentado al tiempo de calificarlo de muy grave por la forma como se cometió el pasado 3 de mayo, paradójicamente la misma fecha que se conmemora la Libertad de Expresión a nivel mundial.
Consideró necesario que los periodistas tengan seguridad en su trabajo y censuró que los atentados que se han dado en los últimos tiempos impidan ejercer un periodismo libre y seguro en todo el país.
Calificó de acertada la medida del Congreso Federal de condenar el homicidio del periodista Carlos Ortega Melo Samper, corresponsal del periódico Tiempo de Durango.
Exhortó a la Procuraduría General de la República (PGR) y a la Procuraduría General de Justicia del Estado de Durango a realizar una investigación exhaustiva y eficaz de este caso.
Dijo que la Fiscalía Especial para Delitos Cometidos en contra de periodistas de la PGR debe atraer este caso y llegar hasta sus últimas consecuencias e intervenir la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
El dirigente de los comunicadores laguneros exhortó al Gobernador de Durango, Ismael Hernández Deras a que gire instrucciones para que se investigue este crimen condenable donde son señalados como principales sospechosos dos funcionarios públicos.
