Para muchas madres de familia el 10 de mayo es un día muy especial, pero para una joven de tan sólo 18 años de edad de la colonia Guayulera que por un descuido perdió a su bebé que se le broncoaspiro con su propia leche, será la fecha más amarga de su vida al recordar a su pequeño de sólo un mes de nacido.
Abuela lo intenta salvar
Al pensar que paramédicos de Bomberos de la estación Poniente, podrían salvarle la vida al menor la señora María Guadalupe Dueñez Ponce abuela del infante lo tomó entre sus brazos y salió del domicilio ubicado en calle Mariano Arista 512 de la colonia Guayulera, e intercepto un vehículo particular para que le llevara a la estación.
Lo intentan resucitar
Al recibir el cuerpo del pequeño entre sus manos Víctor Coronado, Paramédico de la Estación Poniente de Bomberos de Saltillo, le brindo durante varios minutos resucitación cardio vascular al cuerpecito del bebé, sin embargo el pequeño no respondió, ya no presentaba signos de vida.
Por lo que dieron aviso al personal de la Fiscalía General del Estado, que acudió minutos después el agente investigador Miguel Ángel Valdés acompañado de su personal de servicios periciales, que se abocaron a investigar, para después trasladar al pequeño al Semefo para la necropsia de ley, informando la abuela que a las 14:00 horas, su hija Rosa María Dueñez Ponce de 18 años de edad, se encontraba alimentando a su hijo, pero al ir al baño lo dejó recostado en la cama, donde al regresar lo encontró inconsciente.
