Intimidad. Irene Azuela y Diego Luna prefirieron no tener contacto con los laguneros.
Ni "after party" ni convivio... simplemente no hubo nada entre el elenco de la obra El Buen Canario y los laguneros que la madrugada del viernes se dieron cita en un antro de Torreón.
Diego Luna, Irene Azuela, Martín Altomaro y parte del staff de la puesta en escena El Buen Canario (que se presentó con éxito en La Laguna el jueves) se recluyeron en un privado del lugar desde las 00:40 horas que arribaron, hasta las casi tres de la madrugada en que decidieron partir. Los asistentes, entre los que se encontraban algunos medios de comunicación y otros invitados, no tuvieron acceso a los actores, quienes bebieron cerveza y whisky.
El único que se mezcló entre los "mortales" fue Martín Altomaro, en tanto que Azuela fue vista porque tuvo que ir al baño. "Esa fue la única vez que la vimos", declaró uno de los asistentes, quien al igual que el resto esperaba tener más contacto con ellos.
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