El IMSS está preparado para atender a unos 900 mil derechohabientes que se prevé contraigan el virus causante de la influenza humana durante el rebrote previsto para fin de año, sostuvo el coordinador de Vigilancia Epidemiológica y Apoyo en Contingencia del organismo, Víctor Hugo Borja Aburto.
El funcionario del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) estimó que de las 45 millones de personas que atiende el instituto, incluso en IMSS Oportunidades, se tendrán por lo menos 900 mil contagiados con el virus A(H1N1) en esa nueva etapa.
En entrevista con Notimex refirió que a 70 por ciento de éstos se les dará consulta y al resto se le recetará y enviará a su casa en caso que presente sintomatología leve.
Borja Aburto mencionó que según estimaciones se atenderán unos 650 mil casos en las próximas ocho o nueve semanas y para diciembre ya habrá bajado la intensidad del brote.
El IMSS cuenta con una red de mil 200 unidades de medicina familiar y 246 hospitales para atender a la población que requiera el servicio en caso de presentar síntomas de influenza.
Subrayó que el rebrote se esperaba para diciembre y se adelantó, pero a diferencia de abril pasado, cuando se decretó emergencia sanitaria, ahora están "bien preparados" para enfrentarla.
Informó que el instituto diseñó un plan de acción para cambiar dentro de tres a cinco semanas la forma en que se ofrecerá el servicio en clínicas, hospitales y áreas de urgencias a fin de evitar aglomeraciones y mala atención al usuario.
También está garantizado el abasto de antivirales, los insumos para hospitales y Unidades Médicas Familiares -para lo cual se tienen mil millones de pesos-, la protección de sus trabajadores y la compra de 12 millones de vacunas contra el virus A(H1N1).
Se prevé reprogramar para el mes siguiente las cirugías previstas no urgentes, así como algunas consultas, a fin de dar preferencia a los pacientes con influenza.
De igual modo se pedirá a derechohabientes y familiares que no acudan al lugar donde estén los enfermos a fin de prevenir contagios y que sólo se presenten a las unidades médicas si tienen algún padecimiento o síntomas del virus.
El coordinador del IMSS refirió que además se habilitarán áreas para enfermos de influenza y en la entrada de unidades médicas y hospitales se asignará personal que fungirá como filtro para canalizar a la población a zonas determinadas para su atención.
"Se canalizará al paciente al área de atención y sólo se permitirá un acompañante, y si requieren ser hospitalizados habrá pisos completos o áreas específicas para la atención de pacientes con influenza sea con cuidados especiales y se evite el contagio", puntualizó.
Llamó a no tener pánico, pues a 95 de las personas que llegan a padecen influenza "no le va tan mal" y con el uso de antivirales se corta el periodo de la enfermedad, incluso él mismo ya experimentó pues padeció influenza hace tres semanas.
Sin embargo precisó que si son personas vulnerables como diabéticos, hipertensos, mujeres embarazadas y niños menores de tres años deben acudir de inmediato a los servicios de salud si presentan temperatura, tos y dolor de cabeza.
En el caso de las guarderías de la institución en las que se han reportado casos de influenza humana afirmó que "son muy buenos los filtros que se tienen en esos lugares".
Explicó que generalmente cuando las enfermeras detectan casos se cierra la sala donde estuvieron el o los menores con influenza y si es necesario la estancia en general de manera temporal, como ha ocurrido en 11 de diversos estados del país.
Entre otras de las estrategias del IMSS para atender la contingencia resaltó la semaforización de todas las acciones que se realizan como la evaluación de la situación por los directivos del organismo, la vigilancia epidemiológica y el reforzamiento de la comunicación interna y externa.
Reiteró que los servicios de urgencia atenderán a todos los pacientes que presenten síntomas de influenza, ya sea moderada o grave, y se dará tratamiento completo de preferencia en la Unidades de Medicina Familiar que cuentan con atención continua.
El objetivo, recalcó, es contener la enfermedad en el primer contacto con el médico y no en los hospitales donde se espera que sólo lleguen casos graves.
Informó que el IMSS tiene un registro diario de los casos que se presentan y puso como ejemplo que el martes pasado atendió a mil 802 personas en todo el país, de las que 93 requirieron hospitalización y hubo un fallecido que está en la categoría de sospechoso pues aún no se confirma si murió por influenza.
Subrayó que el semáforo también sirve para el riesgo de contagio en diversas zonas del país y que todas las delegaciones lo tienen y va desde el verde, pasa por el amarillo, naranja y rojo, dependiendo de la intensidad y la extensión geográfica afectada.
"En ninguna se ha llegado a rojo sólo a naranja como en Nuevo León, San Luis Potosí, Sinaloa, Baja California Sur y la parte norte del Distrito Federal, donde se vigila más", dijo.
En ese sentido adelantó que "se tienen planeados los recursos que se les asignan respecto al equipo de protección para personal, gel, antivirales y otros medicamentos que se requieren para pacientes hospitalizados".
Borja Aburto puntualizó que de abril a la fecha el IMSS ha atendido a unos 75 mil pacientes infectados con el virus A(H1N1), de los que tres mil 500 han requerido hospitalización, y se han reportado 68 fallecimientos por esa causa.
Finalmente hizo énfasis en que "en el IMSS aprendimos mucho con la primera ola por ser una enfermedad nueva, además de que nos agarró a todos desprevenidos, pero hemos aprendido en lo que corresponde a la planeación y lo que debemos hacer".
