Captura. El coordinador de la Policía Federal, Rodrigo Esparza, dio a conocer los detalles del operativo en el que fueron detenidas diez personas de un grupo del crimen organizado.
La Policía Federal presentó en el centro de mando de Iztapalapa a 10 presuntos sicarios del Cártel de Arturo Beltrán Leyva que tenían la misión de eliminar a miembros de la banda rival "La Familia" en Tultitlán.
En el grupo se encontraban dos menores de edad, un hombre y una mujer de 17 años, que fueron presentados junto al resto de los sicarios ante cámaras, pese a las disposiciones legales que lo prohíben.
En conferencia de prensa, el comisionado de la Policía Federal, Rodrigo Esparza Cristerna, explicó que el grupo estaba liderado por Carlos Villanueva de la Cerda, alias "Óscar Ochoa" o "El Comandante 8", de 36 años de edad, originario de Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Además coordinaba un grupo de sicarios con el que mantenía el control del narcomenudeo en la zona y era el enlace con las autoridades policiacas y municipales de Tultitlán y Cuautitlán Izcalli, vínculos que están siendo investigados.
Esparza Cristerna reconoció que dada la cercanía de Tultitlán con el Distrito Federal, existe la posibilidad que integrantes de la organización de Beltrán Leyva, tengan alguna actividad en esa capital y que el grupo está librando una guerra por el control de territorios con "La Familia".
Al grupo les fueron asegurados seis fusiles AK-47, armas cortas, cargadores, cartuchos, chalecos antibalas, gorras con insignias de la AFI, 24 envoltorios (grapas de cocaína), 104 envoltorios de "piedra" y cinco bolsas con hierba verde, al parecer marihuana, además de cinco vehículos, informaron fuentes de la Policía Federal.