La prueba de fuego para el gobierno ante la nueva composición de la Cámara de Diputados, será alcanzar acuerdos con el priísmo hegemónico que le permitan un presupuesto equilibrado para el año más álgido de la crisis. El coctel es explosivo: más necesidades y menos recursos, dada la caída en la producción petrolera; la baja dramática en la recaudación por la pobre actividad económica; el derrumbe de las remesas; la debacle de exportaciones e importaciones, y la imposibilidad de recurrir a mayor endeudamiento.
Del otro lado de la mesa, el reclamo habla de medidas anticíclicas más efectivas
Ahora que, en el juego de fuercitas, reforzada la prominencia priísta en los gobiernos estatales, la presión para multiplicar la derrama de participaciones será la consigna, en un escenario en que éstas se han derrumbado patéticamente.
Hasta junio pasado la Recaudación Federal Participable registraba una caída en términos reales de 31.8 por ciento en relación al mismo mes del 2008, y de 22.4 en relación con el flujo estimado para este año por la Secretaría de Hacienda.
Digamos que a la dependencia le fallaron los cálculos de cara al impacto de la caída en la recaudación ante la baja en la actividad económica.
El catarrito resultó pulmonía cuata.
Hasta el sexto mes del año pasado el monto había alcanzaba 890 mil 135 millones de pesos, frente a los 648 mil 20 del mismo lapso de este año. El cálculo original hablaba de 835 mil 474 millones.
La explicación se ubica en una caída dramática de 48.8 por ciento en términos reales, es decir descontada la inflación, en el ingreso petrolero, así como una disminución de 15.9 por ciento en los ingresos tributarios en general.
Más al detalle, se abatió 17 por ciento el entero del Impuesto sobre la Renta, y 21.2 el del Impuesto al Valor Agregado. En el primer caso se pasó de 315 mil 963 millones a 277 mil 920, y en el segundo de 229 mil 21 a 191 mil 958.
Bajo ese prisma, las participaciones a las entidades federativas se han caído 20.08 por ciento en promedio, en relación a las proyectadas por la Secretaría de Hacienda.
Los casos más patéticos son Oaxaca, Puebla, el estado de México, Michoacán, Guanajuato y Guerrero, cuyos porcentajes de caída oscilan entre 24.3 el primero, y 25.5 el último.
En el caso de la capital del país, la caída alcanza 24.5 por ciento, en tanto a Tabasco sólo se le recortó el 12.1; a Campeche el 16.4; a Baja California Sur el 16.4; a Sonora el 17.1; a y Colima el 17.3, y a Nuevo León el 18.9.
La rebatiña, pues, se orientará a la justeza del procedimiento del reparto, en un escenario en que el primero en saltar a la mesa fue el Jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard.
Ahora que en el terreno práctico la entidad federativa más golpeada es el estado de México, cuyo monto escatimado alcanza cinco mil 814 millones de pesos, seguido por el Distrito Federal, con cuatro mil cuatro millones.
A Veracruz se le han recortado dos mil 672 millones, en tanto Puebla bajó mil 947 millones; Guanajuato mil 850; Nuevo León mil 610, y Chiapas mil 591.
En el jaloneo, naturalmente, el gobierno planteará incrementar el IVA en alimentos y medicinas de cero a 15 por ciento; el PRI tendrá que hacer válida su promesa de desaparecer el Impuesto Empresarial de Tasa Única, y el PRD peleará por una mayor equidad tributaria.
Más allá, la tentación oficial planteará descongelar el precio de las gasolinas, frente a la exigencia de la oposición en reducir la nómina de los servidores públicos, y desaparecer de plano dependencias sin sustento como la Secretaría de la Reforma Agraria. El gran reto de los cabilderos de la Secretaría de Gobernación será convencer a los priístas de dejar de lado las heridas de la guerra sucia con que el partido oficial intentó repetir el "haiga sido como haiga sido" del 2006; el uso faccioso de la justicia; el terror como arma de proselitismo; la tragedia de la guardería ABC de Hermosillo como bandera; las bravuconadas de su dirigente
La cuesta, pues, está empinadísima.
Ubicado el Partido Acción Nacional como el gran perdedor de la jornada electoral, el voto de castigo lo explica una política errática incapaz de consolidar una estrategia coherente tanto en el renglón económico como en el combate al crimen organizado.
Del catarrito al tsunami económico, pasando por medidas anticíclicas que jamás pudo consolidar, a la par de manipulación de cifras en materia de desempleo.
De acuerdo al último estudio de gobernabilidad del Banco Mundial, México reprueba en tres capítulos: estado de derecho, estabilidad política y control de la corrupción.
Y conste que la mayoría de las empresas gigantes volvieron a poner en la mesa todas las facilidades al partido en el gobierno: apoyos pecuniarios, préstamos de aviones privados, alquiler de camionetas, pago de hoteles, contratación de equipos de sonido
¿VOCERO? ¿PROFETA? Tres días antes de que la Comisión Federal de Competencia ubicara a Teléfonos de México como agente dominante en los mercados de tránsito local y arrendamiento mayoritario de enlaces delicados, el vocal de la Comisión Federal de Telecomunicaciones, Rafael Del Villar, había anunciado la medida, sólo que fijándola a todos los campos que actúa la firma de Carlos Slim.
Se diría, pues, que el ex subsecretario de Comunicaciones en sus ratos libres trabaja como vocero de la dependencia que encabeza Eduardo Pérez Motta, o que pretende notoriedad para ganar la presidencia de la dependencia.
De hecho, ya anunció que en los próximos días la propia CFC dará a conocer el resultado de una investigación sobre medios electrónicos.
HARP Y CEBALLOS Iniciada la carrera empresarial de Alfredo Harp Calderoni con un tropiezo: la quiebra de un restaurante que había instalado en San Ángel, concretamente en el lugar donde se ubicó la llamada "Casa de la Dinamita" en Avenida de La Paz, la lección le obligó a pisar con más firmeza, hasta alcanzar las grandes ligas con la compra de la cadena de tiendas de artículos deportivos Martí. Se diría que le salió el temple con el que su padre, Alfredo Harp Helú, logró remontar el episodio de su secuestro cuya virulencia habla de un cautiverio de meses.
A los 39 años Harp Calderoni había logrado ser un prometedor cineasta, un empresario naviero exitoso, y un activo participante en media docena de Consejos de Administración de empresas gigantes.
Ahora que la tragedia tocó también al ex presidente de la Concamín, Jesús Ceballos Gómez, cuya hija, Yolanda Ceballos Coppel, fue asesinada por el crimen organizado tras sufrir un secuestro.
