Impacto negativo. La Secretaría de Hacienda señaló que la severa crisis económica que afectó al mundo dañará la captación de ingresos tributarios para 2009. ARCHIVO
MÉXICO, DF.- El "tsunami" financiero que impactó la economía de México provocará a lo largo del año una contracción considerable de los ingresos tributarios, reportó la Secretaría de Hacienda.
El Impuesto al Valor Agregado (IVA) registrará una caída de 17.5%, mientras el Impuesto Sobre la Renta (ISR), el Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU) y el Impuesto a los Depósitos en Efectivo (IDE) se caerán 10.8%, en conjunto, reconoció el Jefe de la Unidad de Política de Ingresos de la Secretaría de Hacienda, Juan Manuel Pérez Porrúa.
"Para que el total de ingresos no petroleros disminuya en la expectativa de Hacienda 13.4%, en todo el año", dijo el funcionario.
Adicional a ello, Miguel Messmacher, titular de la Unidad de Planeación Hacendaria, reconoció que en el Gobierno Federal "sí hay una preocupación" por "una disminución significativa" de desempleo, en el 2010.
"A mediados del año se observó una disminución anual de cerca de 500 mil empleos.....esta disminución anual se está volviendo más pequeña.... se esperaría que termináramos con una disminución, obviamente bastante significativa, pero que vaya a ser menor que la disminución que llegó a observarse a mediados de este año", dijo el funcionario.
Expuso que entre julio y septiembre de 2009 se generaron 106 mil empleos formales.
Agregó que la actividad económica mexicana enfrentará una contracción de 6.8%.
El aumento del Impuesto al Valor Agregado (IVA) de 15% a 16%, aprobado por el Congreso, tendrá un impacto de 0.6% en la inflación, el próximo año, aseguró la Secretaría de Hacienda.
"El impacto en el INPC es inferior a 1%, porque el IVA no grava al 100% de las mercancías, tal y como fue propuesto, deja (el aumento del IVA) sin gravamen a 41% del consumo, entonces, aunque aumente el 1%, no lo hace al 100% y el impacto será de 0.6%", dijo Pérez Porrúa. Informó que los cambios en la consolidación fiscal permitirá al fisco, en el 2010, obtener 16 mil 577 millones de pesos de los saldos de impuestos diferidos, con antigüedad mayor de cinco años.
