Alberto Cárdenas Jiménez. (Archivo)
El titular de la Secretaría de Agricultura Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), Alberto Cárdenas Jiménez, negó que el conflicto pesquero se le haya ido de las manos, ni lo ha minimizado ni le ha pasado la bolita a nadie, y mucho menos a sus compañeros del Gabinete. Rechazó que el problema sea factor de un estallido social y adelantó la posibilidad de firmar en los próximos días una solución.
“Yo me veo firmando la semana que entra, en algún momento, un convenio en donde cerremos este problema, con el complemento del Diesel”, dijo el funcionario, quien por vez primera en 24 días de paro camaronero aceptó a tratar el problema que, dijo, “visto en su justa dimensión sólo es una parte de todo el sector pesquero”.
Añadió que no cederá a presiones de otros sectores, como el agrícola y el transporte, que amenazaron con tomar instalaciones petroleras y bloquear carreteras, porque “hay causas en las que todo mundo quiere subirse, a veces, quizá, aunque no lo necesiten”, porque en el caso del campo el panorama es positivo. En pleno vuelo de regreso a la Ciudad de México, tras iniciar un programa de subsidios al maíz y al frijol en Chiapas, Cárdenas Jiménez insistió en que el precio del Diesel no se incluyó en el plan anticrisis del presidente Calderón porque, aún con los incrementos en los últimos 10 meses, “sigue siendo el más barato del mundo”.
“Ahora el Diesel americano saldrá sobre 7.50 y 7.60 pesos, y aquí en México anda sobre 7.30, pero con los dos pesos que damos como subsidio, quedan de 5.40 a 5.20 pesos”, agregó el funcionario. De acuerdo con el incremento semanal de cinco centavos establecido por el Gobierno Federal, el Diesel mexicano alcanzó ayer los 7.53 pesos por litro.