Lorenzo Mejía Morales, presidente de la agrupación, indicó que los estados donde más establecimientos han desparecido son en el estado de México y en el Distrito Federal.
Por la crisis financiera y el aumento en el costo de producción, se prevé que al finalizar el año un gran número de tortillerías cierren sus puertas porque no serán rentables para sus propietarios.
En los últimos meses han desaparecido o cambiado de lugar de funcionamiento alrededor de 20 mil tortillerías en el país por la crisis económica, advirtió la Unión Nacional de Industriales de Molinos y Tortillerías, Asociación Civil (Unimtac).
Lorenzo Mejía Morales, presidente de la agrupación, indicó que los estados donde más establecimientos han desparecido son en el estado de México y en el Distrito Federal.
El dirigente reconoció que la situación que enfrenta la industria es caótica, sobre todo por el incremento en los costos de producción.
"El precio del maíz se compraba a 2 mil 850 pesos por tonelada y en estos momentos se adquiere a 3 mil 400 pesos, por lo que los productores están realmente trabajando con números rojos", indicó.
No sólo es el incremento de la materia prima lo que ha dañado la economía de los más de 60 mil afiliados que tienen la unión en el país, sino también el alza en los insumos, dijo el dirigente.
El aumento de impuestos para el 2010, tal como lo contempla el paquete fiscal, la industria de la masa y la tortilla se verá más afectada porque habrá incrementos en todos los insumos, lo que causará más problemas a los que se dedican a esa actividad en el país, lamentó.
La situación económica que vive el país afectó también el consumo de ese producto básico, ya que las familias antes adquirían un kilo o dos, "sin embargo, ahora ya no compran por esa cantidad, sino por 5 o 7 pesos, lo que va en detrimento de la industria", manifestó.
El kilogramo de tortillas oscila entre 8.50 y 9 pesos. Mejía Morales aseguró que a pesar de las difíciles circunstancias que enfrentan los industriales han mantenido ese precio.
Anticipó que ese precio se sostendrá hasta el último momento. "La situación política que vive el país nos ha dañado seriamente al grado tal que algunos industriales trabajan con números rojos, de ahí que hago un llamado al gobierno federal a que analice bien la situación y evite seguir golpeando a los industriales", puntualizó.
Lorenzo Mejía explicó que para sortear la crisis y evitar que se cierren más tortillerías y molinos presentaron una iniciativa de ley en el Congreso de la Unión.
La propuesta consiste en que los recursos de los programas sociales que son ineficaces en algunos lugares del país sean transferidos al programa denominado "subsidio a la tortilla" para que el producto tenga un precio regulado por kilo que no rebase los cinco pesos para que esté al alcance del consumidor.
De aplicarse este subsidio se incrementaría la producción y el consumo del alimento, consideró.