Violencia. La camioneta blindada detuvo su marcha en avenida Cuauhtémoc, pasando la calle Gómez Palacio, cerca del Templo de Fátima.
Una crisis nerviosa masiva se vivió ayer por la tarde en las inmediaciones del Panteón de Oriente luego que se registrara una balacera en la que resultaron lesionadas dos personas y un comandante de Seguridad Pública Municipal; el Ejército Mexicano aseguró una de las camionetas que protagonizaron el fuego cruzado y detuvo a sus dos tripulantes.
EL PRIMER 'CHOQUE' El reloj estaba a punto de marcar las 5:00 de la tarde cuando los tripulantes de una camioneta blindada de la línea Tundra de color gris fueron alcanzados por una Trail Blazer, un Focus y otro vehículo.
Fue en 5 de Febrero y Reforma, cerca de la Cruz Roja, donde se encontraron los protagonistas de la balacera; desde ese punto la Tundra fue seguida hasta Heroico Colegio Militar y 5 de Febrero, donde abrieron fuego en su contra.
En el lugar estaba una motopatrulla con dos agentes de Vialidad cerrando el paso vehicular, por la romería del Día de Muertos, y prácticamente quedaron en medio de la balacera; los agentes de Tránsito empezaron a correr para salvar sus vidas. La gente que había salido del panteón y que pretendía tomar un camión observó cómo se disparaban los tripulantes de los vehículos mencionados e inclusive vieron cómo se bajaron para disparar mejor, aunque su blanco era blindado.
GENTE ASUSTADA Mientras la Tundra salió del lugar con rumbo a 20 de Noviembre y Libertad, otros vehículos se fueron por Pino Suárez y otras calles de la colonia Hipódromo, pasaron por afuera del panteón disparando provocando daños en dos Suburban estacionadas y heridas de bala en un pasajero de un camión, quien hasta la noche de ayer se encontraba en terapia intensiva en el Hospital General con un balazo en el rostro; también resultó lesionada otra persona y un comandante de la Policía Municipal que se encontraba afuera del camposanto.
La Tundra, con las llantas ponchadas a balazos y con por lo menos 20 impactos de bala, detuvo su marcha en Cuauhtémoc, pasando la calle Gómez Palacio, cerca del Templo de Fátima. Los tripulantes de la Tundra salieron mostrando una especie de credencial. Los soldados detuvieron y revisaron la camioneta, pero no encontraron armas; posteriormente se los llevaron resguardados.