A contrapelo de sus declaraciones públicas en el sentido de que "a nadie le beneficia alargar la huelga", la decisión de la firma india Arcelor Mittal es prolongar el conflicto hasta colocar de espaldas a la pared al líder minero Napoleón Gómez Urrutia
De hecho, pese a que las banderas rojinegras se colocaron el fin de semana antepasado en la empresa siderúrgica ubicada en Lázaro Cárdenas, Michoacán, fue hasta ayer lunes cuando se reanudaron las pláticas de avenencia.
La apuesta es simple: sitiar por hambre al sindicato minero, dado el agotamiento de sus fondos de resistencia, tras los dos años en que se han prolongado las huelgas en Minera de Cananea y dos plantas ubicadas en Fresnillo, Zacatecas, y Taxco, Guerrero, todas ellas del Grupo Minera México.
Como usted saber, el asunto ha brincado de juzgado en juzgado laboral, en la obstinación de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje de declarar inexistentes las huelgas y del sindicato en ampararse contra las resoluciones, lo que ha minado gravemente no sólo la moral, sino la lealtad de los mineros hacia su dirigente.
Un paro largo en la ex Siderúrgica Lázaro Cárdenas Las Truchas adquirida por la poderosa firma india al Grupo Villacero, pues, podría representar la puntilla para éste. Por lo pronto, la ventaja pareciera estar a favor de la empresa, considerando que su propuesta para evitar el estallido de la huelga está por encima de la media planteada por firmas similares en las revisiones contractuales.
Estamos hablando de un incremento salarial de siete por ciento, más dos puntos adicionales por competitividad; 2 mil 500 pesos de apoyo extraordinario, y cinco pesos diarios para despensa.
Del otro lado de la mesa, empero, el sindicato se queja de una exigencia anexa para avalar la cancelación de cientos de plazas, lo que la empresa niega, alegando que en tal caso se pretende la reubicación de trabajadores a sus filiales Fertinal y Vega Trefilados
Se diría, pues, que la rebelión de los bases se apuntalaría en la intransigencia de Gómez Urrutia para alcanzar un acuerdo.
Ahora que ante la dramática caída de la demanda de acero en el entorno global, a Arcelor Mittal no le perjudica gran cosa la suspensión de actividades, en un escenario en que los paros técnicos pasan lista de presente todos los días.
De hecho, la más importante de las filiales de la firma, instalada en Florange, Francia, ordenó una dramática caída en la producción de todas las plantas instaladas en la Unión Europea, lo que provocó que los trabajadores bloquearan sus accesos.
El mes anterior la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero había reconocido una caída en la producción siderúrgica de 50%, afectando fundamentalmente los materiales planos utilizados en la industria automotriz.
El mismo organismo aceptó que todas las firmas del ramo estaban despidiendo personal, en una banda de cuatro por ciento a 14 por ciento.
El propio director general de Arcelor Mittal, PS Venkataramanan, habló, en el entorno, de una grave acumulación de inventarios.
Y si le seguimos, la principal compradora global, China, desconoció a finales del año pasado contratos con un valor de mil millones de dólares para adquisición de acero, chatarra de fierro y coque o mineral de hierro.
Una de los más afectados fue México, dada la gran cantidad de desperdicio de metal que exporta, al punto que una de nuestras comercializadoras, ASMAC, habló de demandar al gobierno chino.
En la carambola, Altos Hornos de México debió suspender su proyecto "Fénix", que según ello empujaría su salida de la suspensión de pagos en que está inmersa desde hace una década.
La alternativa de crecimiento se había planteado hace un año, en un efímero auge de la industria a nivel mundial.
En ese mismo contexto, la propia firma india en huelga, sembrada como la primera productora siderúrgica del mundo, había anunciado una inversión de 600 millones de dólares para la construcción de una nueva planta en el país, que incluiría un horno eléctrico y un molino para producir barras de acero y carbono destinadas a los sectores automotriz y de la construcción.
Digamos que Arcelor Mittal no tiene prisa.
La prueba es de resistencia para Gómez Urrutia, sometido a fuego cruzado del gobierno y de los propios mineros.
En los próximos días, finalmente, una instancia de arbitraje con sede en Nueva York iniciará el estudio de la demanda interpuesta por el grupo Modelo, la principal cervecera del país, contra su similar belga Anheuser-Busch Inbeu.
De acuerdo a la ruta crítica prevista, la resolución final llegaría en diciembre.
Como recordará usted, el reclamo se planteó en octubre del año pasado bajo el alegato de la firma mexicana encabezada por Carlos Fernández de que la integración entre las compañías Anheuser-Busch e Inbeu violó los acuerdos de inversión pactadas con la primera.
Esta, como se sabe, es socia del Grupo Cervecero Modelo y de su controladora, el grupo Diblo.
La exigencia plantea un pago por daños y perjuicios, cuyo monto, ¡válgame Dios! es de dos mil 500 millones de dólares.
ESPARZA EN EL LIMBO
A contrapelo de los festejos del Sindicato Mexicano de Electricidad por la reelección de su líder, Martín Esparza, hete aquí que del dicho al hecho todavía hay un largo trecho.
Los disidentes acaban de plantear un nuevo recurso ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje para anular la elección, bajo el alegato de haberse alterado el padrón.
Dicho con todas las letras, votaron algunos que no tenían derecho.
La resolución se hará pública en los próximos días.
VW SIN SALIDA
Hasta anoche, a unas horas de vencerse el emplazamiento a huelga planteado por su sindicato, la firma Volkswagen de México no había llegado a un arreglo con éste.
Las pláticas se empantanaron al ofrecer la firma un incremento salarial de sólo uno por ciento, en paralelo a la entrega de bonos de una sola vez por cinco mil 500 pesos.
Los trabajadores planteaban un aumento de ocho por ciento, es decir tres puntos más allá de la media en revisiones contractuales.
El plazo se vence a las 11 horas de hoy.
FILMAN TRAGEDIA
En los próximos días se iniciará la proyección de un largometraje denominado "El Ciruelo", en el que se narra la tragedia de este poblado de Nayarit ubicado en el margen del río Santiago, que desapareció al inundarlo la presa "El Cajón", una obra de la Comisión Federal de Electricidad.
La población fue obligada a evacuar, pese a los recursos legales interpuestos.
Lo dramático del asunto es que hasta hoy no han recibido la indemnización correspondiente.
La historia se detalla en la obra de Emiliano Altuna y Carlos Rossini.
