Lanzadas las fanfarrias al vuelo hace unas semanas por lo que se ubicó como el campanazo científico del nuevo milenio: la elaboración del mapa del genoma de los mexicanos, hete aquí que tras bambalinas hay una larga historia de corrupción.
La paradoja del caso es que al fragor de la euforia que llenaba de palmo a palmo la residencia oficial de Los Pinos, se escuchó un rezongo del ex funcionario de la Presidencia, hoy senador panista, Ramón Muñoz, señalando que el mérito del asunto correspondía a su ex jefe, Vicente Fox Quesada.
Dicho con todas las letras, el presidente Felipe Calderón se estaba colgando medallas que no le correspondían.
Triunfos robados, pues.
El caso es que en las entretelas de la indudable hazaña de la medicina genómica mexicana, se ubica un capítulo más del México negro, que oscurece el final feliz de la novela.
Planteada para inaugurarse en octubre del 2006, el edificio del Instituto Nacional de Medicina Genómica no tiene aún para cuándo. De hecho, el abandono, la ruina, provoca un cuadro patético de cara a la inminencia de la temporada de lluvias.
La inversión, calculada originalmente en 250 millones de pesos alcanza ya mil 200
En el camino, se ha destituido y en algunos casos inhabilitado a los jefes de obra, en un mar de sospechas de compras abusivas de materiales, de cambios caprichosos de estructuras, o simple y llanamente de retoques para hacer más espectacular la fachada.
De pronto, resulta que al director general, Gerardo Jiménez Sánchez, no le pareció que el elevador no abriera directo a su oficina; que los cubículos para investigadores no tuvieran mayor amplitud, o que la fachada no brillara más
Lo inaudito del asunto es que al calor de la gritería y los repiques, el Instituto compró la contraportada o cuarta de forros de una revista médica internacional patrocinada por el Genoma Canadá y el Ontario Genoma Institute, para deslumbrar al mundo con su infraestructura.
El despliegue habla de que nuestro país participa en el desarrollo integral de la medicina genómica a través del establecimiento del Instituto Nacional de Medicina Genómica, el undécimo Instituto Nacional de Salud.
El catálogo habla de una infraestructura en la que se ubican una unidad de Secuenciación e Identificación de Poliformismos; otra de Proleontómica Médica; una más de Supercómputo y TI, en paralelo a otras de Microscopia Confocal y Microdisección por Láser y Genómica Computacional y Bioinformática.
México, pues, a la vanguardia del planeta en el escenario científico.
Más aún, la sede del Instituto Nacional de Medicina Genómica cuenta con una Unidad de Investigación Clínica, otra de Propiedad Intelectual, Biblioteca, Aulas, Auditorio y un Centro de Estudios Éticos, Legales y Sociales en Medicina Genómica.
El asombro de la medicina moderna.
El caso es que para ilustrar el portendo se coloca a todo color una fotografía del edificio
La burla, pues en todo lo alto, con dirección al calce para enviar felicitaciones: Periférico Sur 4124 Torre Zafiro II, Piso 5, colonia Jardines del Pedregal.
El problema, por si le faltara algún pelo al gato, es que habiéndose constituido un patronato para apoyar las tareas del Instituto desde el plano privado, éste no ha podido realizar su tarea
Presidido por el presidente de Nestlé México, José Represas, en éste caben el presidente de Televisa, Emilio Azcárraga Jean, Nina Zambrano, Jacobo Zaidenweber...
De acuerdo a la ruta crítica planteada hace cinco años a la creación, por mandato de ley, del Instituto Nacional de Medicina Genómica, entre junio y diciembre de 2005 se lanzaría la licitación para el contrato de construcción del edificio-sede, firmándose éste en el 2006
El presidente Vicente Fox acudiría a la ceremonia.
El caso es que llegada la fecha apenas había un cascarón, lo que obligó a la firma de un convenio que ampliaba un año el plazo.
El 2007, pues, sería el bueno.
El hecho es que dos años después el cascarón sigue intacto, por más que el presupuesto se multiplicó por cinco, en un escenario en que según el último diagnóstico no hay planeación y continuidad; se han realizado excesivos cambios al proyecto; los recursos no han fluido con oportunidad; la residencia de obra no ejecuta sus funciones ni asume su responsabilidad, y no se ha hecho caso en problemas de calidad y cumplimiento de especificaciones, por ejemplo, los nodos y los prefabricados.
En el camino, la Secretaría de la Función Pública, la Auditoría Superior de la Federación y la Secretaría de Hacienda han realizado decenas de auditorías, removido a funcionarios menores y lanzado varios extrañamientos al director del Instituto, Gerardo Jiménez Sánchez, sin que hasta el momento la obra tenga visos de concluirse.
El daño a la nación podría llegar a mil millones de pesos.
Por lo pronto, este mes deberá llegar la ratificación o rectificación del director general del Instituto.
Su premio, pues
Las señales apuntan a un rápido arreglo entre la línea aérea Aviacsa, con sede central en Monterrey, y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, en cuyo marco ésta podrá seguir operando
La llave mágica que abrió la puerta fue un desplegado de la firma, en que acusando a la dependencia de violar una suspensión provisional de un juez para protegerla de cualquier intento de bajarla del aire.
Y aunque la SCT pudiera alegar un motivo de fuerza mayor, es decir, garantizar la seguridad de los pasajeros, la empresa avaló el mantenimiento adecuado de sus naves con el prestigio de expertos a nivel internacional.
Se acorraló, pues, a la autoridad, en un marco que pareciera que la presión apunta hacia despojar a la firma de las posiciones que mantiene en el aeropuerto internacional de la ciudad de México.
ACORRALAN A LA COMER
La filtración del resultado de una auditoría externa practicada a la cadena de tiendas Comercial Mexicana en la que se duda de su capacidad financiera para seguir operando, levantó una espesa polvareda entre sus acreedores, al punto de sumar votos hacia el rechazo de su proyecto de reestructura.
De acuerdo a éste, la deuda de dos mil 200 millones de dólares con los bancos entre quienes se pactaron las fallidas apuestas de la empresa en materia de derivados, se cubrirá en siete años.
Sin embargo, los signos indican que se trató de una estrategia de la empresa.
DE ENDENANTES De acuerdo a la versión de Petróleos Mexicanos, los contratos asignados a un consorcio lidereado por una firma estadounidense para explorar y en su caso explotar pozos de la Cuenca de Chicontepec y el asignado para transporte por ductos a la empresa Mexssub, se pactaron antes de la vigencia de la reforma energética.
No hubo, pues, violación a ésta.
Sin embargo, la licitación para el primer contrato se lanzó el 11 de diciembre del año pasado, es decir 13 días después de expedi r el Decreto de reforma en el Diario Oficial, por más que se alega que la maduración del proyecto lleva muchos meses previos.
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