El consejero electoral Marco Antonio Baños se pronunció en contra de la anulación del voto y expresó su rechazo al llamado que hacen organizaciones y "opinadores" públicos de efectuar el voto en blanco el 5 de julio próximo.
Al asistir a la Quinta Reunión Regional de Consejeros Electorales de los Consejos Distritales del país, Baños Martínez reconoció que la autoridad electoral y los partidos políticos tienen el reto de motivar e incrementar la participación ciudadana.
En el acto presidido por el consejero presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), Leonardo Valdés Zurita, expresó su rechazo a la corriente de "opinadores" públicos que promueve el voto en blanco.
Recordó que el acudir a las urnas, a sufragar, es un derecho que costó mucho a la ciudadanía.
Por lo que anular el voto el próximo 5 de julio, dijo, es una acción que iría en contrasentido del desarrollo del sistema democrático.
"Tenemos que convocar a la ciudadanía para que en el ámbito de su responsabilidad, de su libertad, escoja entre las opciones partidarias" aseguró.
El sistema democrático mexicano, dijo, tiene como eje central a los partidos políticos y existen ofertas para que los ciudadanos puedan ejercer su voto.
En presencia del presidente del IFE, Baños remarcó que la participación política de los ciudadanos depende también del nivel de las campañas y plataformas electorales, así como de los candidatos.
Por su parte Valdés Zurita reiteró que existen instrumentos electorales que permitirán tener unas elecciones en condiciones de seguridad y confiables.
Por lo que dijo, se garantiza que los votantes ejerzan plenamente su derecho al sufragio, en torno de una elección pacífica en todos los rincones del país.
Por último, el consejero Marco Antonio Baños precisó que en total 77.4 millones de mexicanos recogieron su credencial para votar por lo que están en posibilidad de ejercer su derecho.
Además de que se tiene contemplado la instalación de 139 mil 246 casillas y al menos 490 mil 818 ciudadanos fueron ya capacitados en la segunda etapa para ser funcionarios de casilla.
