Los cuerpos de las personas que murieron calcinadas en un accidente el pasado martes sobre la carrtera Saltillo-Torreón, tramo La Cuchilla, kilómetro 199+200, ya fueron entregados a sus familias.
Iban de paso
José Benigno Salinas, de 80 años, María del Refugio Ávalos, de 75, Paulo Rodríguez, de 71, Carmen Rodríguez, de 63, Rufino Martínez, de 68, y Joaquín Martínez, de 45, originarios de Simón Bolívar, municipio de Durango, vivían desde hace más de 20 años en Oklahoma, pero el pasado fin de semana decidieron viajar a su país para acudir a Durango capital a recibir el dinero de los ex braceros. El lunes por la noche salieron del vecino país y avisaron a sus familiares en el ejido José Isabel Robles, de Simón Bolívar, que arribarían el martes por la tarde al ejido, pero nunca llegaron. Ayer por la mañana llegaron a San Pedro los familiares de los occisos, quienes realizaron las diligencias necesarias para llevarse los cuerpos a José Isabel Robles, donde serán sepultados. Según las investigaciones realizadas, la causa del accidente fue que Joaquín Martínez, conductor de la camioneta, dormitó, lo que ocasionó que se estrellaran.