Perseverancia. Es muy común que los emprendedores se enfrenten a un sinnúmero de obstáculos para echar andar sus ideas, sin embargo, existen figuras como las incubadoras de negocio que facilitan el difícil camino de bajar recursos federales y poner en marcha un proyecto como el de Manuel Méndez, quien en breve fabricará maquinaria.
Un largo camino deben andar los emprendedores para obtener un apoyo económico en La Laguna.
Manuel Méndez Cervantes es un joven estudiante de 22 años, quien cursa el noveno semestre de la carrera de ingeniería en mecatrónica en el Instituto Tecnológico de La Laguna. Él participó junto a otros alumnos en el proyecto de incubación que lanzó Met Mex Peñoles en 2007, terminando su proyecto para la fabricación de una máquina roladora de perfiles de aluminio. El proyecto por sí mismo llamó la atención de los organizadores, pero también de empresas regionales y nacionales, quienes le pedían cotizaciones para la compra de los equipos.
Sin embargo, la incubadora no estaba autorizada por la Secretaría de Economía (SE), por lo que no podía bajar recursos del Programa denominado Capital Semilla. Alentado por las oportunidades que se le abrían con los pedidos que se querían hacer, pero ante la falta de capital no podían fabricarse nuevos prototipos, Manuel decidió tocar puertas en Nacional Financiera y en bancos comerciales para ver que las posibilidades de obtener una línea de financiamiento, pero se dio cuenta que la tarea era muy complicada, pero sobre todo muy caro obtener un préstamo a tasas de interés de hasta un 55 por ciento.
Por ello Manuel decidió pasar por segunda ocasión por el proceso de incubación, inscribiéndose a la convocatoria hecha por la Incubadora de Agronegocios y Turismo de esta ciudad. El pasado fin de semana logró obtener su constancia de haber sido asesorado durante 6 meses y emprender por fin el arranque de su empresa denominada Diseños y Fabricación de Maquinaria.
Manuel relató que "ha sido muy complicado acceder al Capital Semilla que maneja la SE", ya que es necesario presentar documentación necesaria para poder concluir el proceso de incubación nuevamente.
Sin embargo, confesó que "todo está en base a lo que se quiera lograr". Relató que durante estos 2 años tuvo que tocar muchas puertas en bancos, los cuales le pedía de entrada el tener su alta en Hacienda desde hace 2 años, así como el pagar tasas de interés altas que van desde un 25 por ciento si ven que el proyecto tiene mucha viabilidad, pero que en otros casos se aplicaba una tasa mayor del 55 por ciento.
Contrario a otros compañeros de él que se graduaron hace 2 años, Manuel continuó persistiendo en su idea de montar su empresa y fabricar esta maquinaria, por lo que manifestó que el rechazo que recibió en cada una de las entrevistas con ejecutivos bancarios lo obligaba a moverse y "no quedarme parado y salir adelante".
Confesó que lo que más lo animaba fue que la gente le decía que el proyecto era bueno y que siguiera adelante, sobre todo si el comentario venía de empresas de Latinoamérica.
PATENTE PENDIENTE
Manuel dijo que durante este tiempo le ha hecho algunas mejoras a la maquinaria diseñada, sin embargo, confesó que la innovación no está registrada y busca apoyos para registrar la patente.
El costo es de aproximadamente 10 mil pesos, por lo que dice que "a ver de dónde obtenemos apoyos, no tengo los 10 mil pesos para patentarlo y lo tengo que buscar".
El emprendedor declaró que se oyen muchos programas de apoyo, pero consideró que sólo se interesan en aquellos proyectos que están en el Centro, pero no sabe el porqué no llegan aquí. "Uno los tiene que buscar".
Recordó que en su búsqueda por bajar recursos a tasas de interés competitivas tocó puertas en Nafin buscando acceder a un programa que apoya las propuestas de emprendedores con inversionistas nacionales, pero no tuvo respuesta, al igual que en los bancos.
Dijo que en la mayoría de los casos le tocó ver que las propuestas de los bancos son prestar a tasas de interés muy elevadas, por lo que optó en rechazarlo porque los intereses le comerían el proyecto.
Manuel espera que en 3 meses como máximo bajen los recursos del Programa y una vez que se tenga el recurso, arrancar la empresa y crear fuentes de empleo, cerca de 3 contrataciones. La tasa de interés que aplicará es del 12 por ciento, pero podría bajar a un 9 por ciento.
Confesó que su problemática se repite en amigos que tienen hasta 28 años y que no encuentran recursos para poder echar andar sus ideas, sus proyectos, por lo que consideró oportuno crear nuevos sistemas para hacer accesible un crédito.
AÑOS
Tardó el emprendedor en bajar recursos.
12
POR CIENTO
Es la tasa de interés que aplica el programa.
