Bomberos palestinos apagan los restos del incendio en la casa del asesinado líder de Hamas, Nizar Rayan, tras ser atacada por cohetes israelíes, en el campo de refugiados de Jabaliya, Franja de Gaza. (EFE)
Atacan el Parlamento y el Ministerio de Educación en Gaza.
El año nuevo en la Franja de Gaza comenzó ayer con nuevos ataques aéreos israelíes contra blancos de Hamas por sexto día consecutivo, mientras el grupo islamista prometió seguir luchando y la cifra de muertos llegó a 400.
Israel subió ayer un escalón en su ofensiva a Gaza al matar a Nizar Rayan, destacado líder de Hamas, y retomar así la política de “asesinatos selectivos” contra dirigentes islamistas que aplicó en los años más duros de la Segunda Intifada.
Rayan, su mujer y sus ocho hijos murieron en un bombardeo aéreo contra su vivienda en el campo de refugiados de Yabalia, en el Norte de Gaza, informaron fuentes médicas.
Era el dirigente más importante de Hamas en el Norte de Gaza y se encargaba de coordinar las ramas política -el partido- y militar de Hamas, las Brigadas de Ezedín Al-Kasam.
Fuentes militares israelíes justificaron el bombardeo por su pasada “participación en la organización de atentados suicidas en Israel”, como al que envió a uno de sus hijos en 2002.
Enmarcado en la línea dura del movimiento, el dirigente asesinado ayer había abogado en los últimos días por retomar los atentados terroristas en Israel en respuesta al bombardeo masivo israelí en Gaza iniciado hace seis días.
Doctor en Filosofía Islámica, Rayan es la víctima de mayor rango de la ofensiva israelí “Plomo fundido”, que ha causado más de 400 muertos -un 40 por ciento civiles- y 2 mil heridos, según el balance dado a conocer ayer por el jefe del servicio de emergencias de Franja de Gaza, Moawiya Hasanein.
Un cuarenta por ciento de los 2 mil heridos por estos ataques es de mujeres o niños y una décima parte se encuentra en estado grave, precisó Hasanein.
La muerte de Rayan remite a la política de “asesinatos selectivos” que Israel aplicó entre 2002 y 2004, entre otros al líder y fundador de Hamas, Ahmed Yasín, y a su sucesor, Abdelaziz Rantisi.
Tras la tregua unilateral declarada por las milicias palestinas en 2005, Israel sólo dirigió sus misiles contra dirigentes de la Yihad Islámica, un pequeño, pero radical grupo que no se adhirió al cese de hostilidades.
La muerte de Rayan y su familia llegó tras una madrugada de bombardeos en los que perdieron la vida otros cinco palestinos.
Los primeros minutos de 2009 estuvieron marcados en Gaza por los misiles de la Fuerza Aérea israelí, que en los últimos seis días ha bombardeado cientos de objetivos vinculados a Hamas, como ministerios, viviendas de activistas, comisarías, mezquitas, la sede de una ONG y edificios de la Universidad Islámica.
Ayer por la madrugada fue el turno del Parlamento y el Ministerio de Educación, informó el Ejército al definirlos como parte “fundamental de la infraestructura de los grupos terroristas en Gaza”.
También fueron destruidos cinco túneles subterráneos en la frontera entre Gaza y el Sinaí egipcio, por los que entra de contrabando armamento y todo tipo de productos escasos en la Franja tras año y medio de bloqueo israelí.
Algunos residentes relataron además bombardeos terrestres, que se suman a los que efectúan la aviación y los navíos de guerra que patrullan las costas de la Franja.
Hace seis días que la mayoría de la población de Gaza vive encerrada en sus casas, sin agua ni electricidad y con el único sonido de bombardeos, ambulancias y los aviones no pilotados de la Fuerza Aérea israelí, que sobrevuelan constantemente la zona.
Israel mantiene desplegados soldados y tanques en torno a la Franja con vistas a una eventual incursión terrestre.
Un 19 por ciento de los israelíes apoya una invasión de Gaza, mientras que un 52 por ciento prefiere que siga la actual política de bombardeos, según un sondeo difundido ayer por este rotativo.
Por el contrario, un cinco por ciento de los consultados quiere que se negocie una tregua con Hamas lo antes posible.
El primer ministro israelí, Ehud Olmert, subrayó ayer que su país tratará a la población de Gaza “con guantes de seda”, pero a Hamas con “puño de hierro”.
Las milicias de Gaza lanzaron ayer cuarenta proyectiles contra el sur de Israel, uno de los cuales generó un incendio en un edificio de ocho plantas en Ashdod, sin causar víctimas.
El medio millón de israelíes que vive en un radio de cuarenta kilómetros de Gaza son ahora blanco potencial de los cohetes palestinos, que han causado cuatro muertos desde el inicio de la ofensiva.
‘No habrá ni tregua ni alto el fuego’
La ministra de Exteriores israelí, Tzipi Livni explicó ayer al presidente francés, Nicolas Sarkozy, que aún no es hora de frenar la actual ofensiva de su país en la Franja de Gaza y que los bombardeos seguirán hasta que Hamas frene sus ataques contra Israel.
“Tomaremos nuestra decisión llegado el momento”, dijo a la prensa la jefa de la diplomacia israelí a la salida del Palacio del Elíseo de París, donde ayer fue recibida por el jefe del Estado galo quien visitará la región los próximos lunes y martes, en un nuevo intento de mediación para lograr el alto el fuego.
En un tono contundente, Livni explicó que la decisión de frenar la operación militar se adoptará en base a las “evaluaciones cotidianas” que Israel realiza de la misma y cuando esas evaluaciones le permitan tener claro que Hamas ha comprendido que no puede seguir como hasta ahora.
Con estas declaraciones, la ministra deja claro que Israel tampoco está dispuesto a aceptar la tregua humanitaria de 48 horas que propuso Francia.
Parlamentarios árabes condenan ataque
Parlamentarios árabes reunidos en la ciudad Sureña de Tiro (Líbano) condenaron ayer la agresión israelí contra la Franja de Gaza e instaron a los países de la región a adoptar una postura conjunta frente a estos ataques.
La reunión fue convocada por el jefe del Parlamento libanés, Nabih Berri, y congregó a legisladores de los países árabes (a excepción de Arabia Saudí), así como ministros, diputados y dirigentes religiosos.
“Los objetivos de la guerra de Gaza superan las próximas elecciones parlamentarias (en Israel) y no se limitan a Gaza. Es la tercera guerra contra los palestinos y su objetivo es eliminar la resistencia y lo que representa, para imponer un nuevo Oriente Medio bajo las condiciones israelíes”, afirmó Berri.
El jefe del Parlamento libanés expresó la necesidad de que los países árabes apoyen la resistencia contra Israel y pidió a este Estado una tregua inmediata, poner fin a los asentamientos judíos en los territorios palestinos y celebrar una cumbre árabe con carácter urgente.