Daniel “Chato” Noriega regresó a los entrenamientos para su próxima pelea del viernes 13 de febrero en Gómez Palacio, Durango. (Archivo)
El púgil lagunero Daniel “Chato” Noriega se prepara para su siguiente compromiso en el ring, que será tentativamente el viernes 13 de febrero en el mismo escenario de sus recientes triunfos, el Gimnasio Municipal Luis L. Vargas de Gómez Palacio.
La función “Venganza en La Laguna” pondrá al oriundo de Torreón frente a uno de sus verdugos en el cuadrilátero, el capitalino Ángel “Canguro” Rezago, en combate que se pactaría a diez vueltas en la división de los supermosca.
Fue el seis de octubre de 2006 cuando ambos boxeadores se enfrentaron en el Salón Marbet Plus de Ciudad Nezahualcóyotl, Estado de México, con triunfo para el local, de 23 años, por la vía de la decisión mayoritaria en ocho rounds.
La Promotora Noriega-Muñoz hace los arreglos necesarios con la Dirección Municipal del Deporte y la Comisión de Box Profesional de Gómez Palacio para montar esta velada en la que también intervendrán púgiles laguneros ante recios contendientes.
En caso de que Rezago no esté en condiciones de contender, tras el receso navideño de diciembre, se buscará al exitoso regiomontano Oswaldo “Chapo” Rodríguez, aunque tampoco se descarta al tamaulipeco Julio “Caballito” Grimaldo.
Noriega, quien regresó a los entrenamientos hace tres días, tras noquear en cuatro asaltos al zurdo Francisco “Trompito” Márquez en la tradicional función de Año Nuevo, también busca revancha frente al saltillense Saúl Jonathan Gutiérrez, el cual lo derrotó por decisión unánime tras diez fragorosos episodios en 2008.
El “Chato” no descarta medirse a mediados de 2009 al tapatío Jesús “Zurdito” Jiménez, a quien no le pudo arrebatar el título nacional mosca. El viernes 23 de enero, el de Guadalajara sostendrá una trepidante confrontación en el Foro Scotiabank de Polanco en la Ciudad de México, ante el defeño Alejandro “Payasito” Hernández.
En el Gimnasio Boxeo de Oro, el pupilo de Rafael Díaz Covarrubias comenzará esta semana una exigente preparación física, que incluye visitas al lecho seco del Río Nazas, lugar donde fortalecerá las piernas para tener resistencia arriba del cuadrilátero.