Construyen edificio. Ubicado en la esquina de Paseo de la Reforma e Insurgentes, el nuevo complejo del Senado concentrará todas las actividades de los legisladores. Actualmente el 80 por ciento de los edificios utilizados por los tres poderes es rentado.
Anualmente se erogan más de 100 millones de pesos para el funcionamiento de un instituto que administra los bienes inmuebles nacionales, pero lo hace mal.
El caos reina en el arrendamiento, adquisición, construcción y mantenimiento de las sedes oficiales de los tres Poderes de la Unión.
El Inventario Nacional de Bienes Inmuebles, a cargo del Instituto Nacional de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales (Indaabin), no da certeza sobre el buen uso y manejo de los 2 mil 678 edificios que son usados por la administración pública centralizada, el Congreso y el Poder Judicial.
En el más reciente informe de fiscalización de la cuenta pública -correspondiente al ejercicio 2007- dado a conocer en marzo pasado, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) señaló que el Indaabin no ha establecido indicadores que puedan evaluar los alcances e impacto que representa en el erario el pago de rentas en el gasto público federal.
El Indaabin informó el año pasado que el 80 por ciento de los edificios utilizados por los tres poderes es rentado, pero este dato no se puede verificar pues el inventario disponible en Internet no lo especifica.
Tampoco se puede obtener una cifra exacta del monto que se paga anualmente en alquiler y mantenimiento, aunque los programas de adquisiciones del Gobierno Federal, el Congreso y el Poder Judicial indican que este año se pagarán alrededor mil 450 millones de pesos.
Esta falta de transparencia fue señalada por la ASF.
Otro problema derivado de las malas administraciones la duplicidad de oficinas en la que incurren decenas de funcionarios de alto nivel en los tres poderes.
En Estados Unidos, en cambio, el inventario de inmuebles del Gobierno detalla número de edificios, ubicación exacta, dimensiones y si es propio o rentado. Cuando son de alquiler se especifican costos, tiempos de contrato e información del propietario.
Se solicitó una entrevista con el titular del Indaabin, Juan Pablo Gómez-Morin Rivera, pero fue negada con el argumento de estar a la espera de los cambios que puedan darse en la Secretaría de la Función Pública, de la que depende el instituto.