Duro. El elenco de la obra trabajó duro desde el primer ensayo, en el cual, no faltaron los detalles a pulir. EL UNIVERSAL
MÉXICO, DF. - Veinte años quizá no sean muchos para un árbol, pero para una obra musical significa toda una brecha generacional de espectadores.
A dos décadas de que se estrenara la primera versión de ¡Qué Plantón!, su creador Memo Méndez está otra vez en el escritorio de director para, literalmente, dar vida a pinos, nopales, rosas, hiedras venenosas, cebollas, mangos petacones y uno que otro organismo multicelular sin clorofila incapaz de realizar la fotosíntesis, es decir, hongos.
El invernadero en que comienza la historia es muy diferente al que se montó hace 20 años.
Con tecnología nueva y luces robóticas, la escenografía se ha modernizado para evitar que el concepto "envejezca" y que, por el contrario, "mantenga los rasgos de veracidad" necesarios para que el público se crea la anécdota de un profeta que le da vida a las plantas mediante polvos mágicos. Se añade, además, el sentido del olfato porque la producción pretende aromatizar el teatro para que el espectador huela el bosque, el desierto, la selva.
Durante el primer ensayo general, Méndez batalló precisamente con un elemento tecnológico: la plataforma elevada por la que aparecen el profeta en el primer cuadro y la cebolla en el tercero. "Jimena ¿va a bajar el profeta o no?", le preguntaba Méndez a su jefe de foro manager mientras el profeta, interpretado por Rubén Cerda, permanecía parado en espera de desaparecer de la faz de la tierra ante los atónitos ojos del nopal.
Cansado de esperar, Cerda se movió de la plataforma y justo en ese momento el artefacto comenzó a descender. "Espérenme, falto yo", gritó el actor como si se le hubiera ido el tren. Lupita Sandoval, quien alternará a la cebolla con Alejandra Ley, explica:
"La esencia de la obra es la misma que hace 20 años: crear una conciencia ecológica a partir de la fantasía de que las plantas deben gobernar el mundo en vez de los seres humanos.
"Pero en cuanto a la forma, se ha renovado con la tecnología que hace 20 años era impensable para la escenografía y los vestuarios". Y si 20 años son muchos para una obra, lo son más para una persona. Alan Estrada, quien interpreta al Pino, apenas había nacido cuando se estrenó aquella primera versión."No alcancé a verla, pero desde la primera vez que me invitaron a la audición yo sabía de lo que me hablaban. Me bastó leer el guión para aceptar la propuesta porque me di cuenta de que es una obra bien estructurada". María José, quien hace a la hiedra venenosa, explica:
"Cada una de las plantas tienen ciertos rasgos y características de la sociedad actual, somos plantas humanizadas. La hiedra es, en ese sentido bastante perra". Es decir, que manipula para conseguir el poder.
En la obra, el profeta le da movimiento y habla a seis plantas para que resuelven un enigma que les permitirá gobernar al mundo: tienen que descubrir qué característica los hace diferentes del resto de los seres vivos.
Desde el comienzo de la obra, la hiedra intenta tomar el liderazgo del grupo y pone en riesgo el éxito de la misión.
LUPITA SANDOVAL
Actriz