Inseguridad y crisis. Debido a las bajas ventas, el sector restaurantero se ha visto en la necesidad de despedir empleados de diversas áreas, desde meseros, cocineros, repartidores, hasta personal de limpieza.
Socios de la Canirac están desesperados, las ventas no repuntan por la falta de dinero.
En menos de dos meses, los restaurantes afiliados a la Canirac han despedido a más de 200 empleados debido a que la situación económica de los establecimientos simplemente no repunta, pues el sector se ha visto impactado tanto por la crisis mundial como por la inseguridad en la región.
"Cada vez se batalla más para cubrir las rentas de nuestros locales, para cubrir los pagos al Infonavit, al Seguro Social, los impuestos", dijo Armando Álvarez de los Santos, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac).
Señaló que diversos restaurantes han recurrido al recorte de personal, aun cuando se trata de una práctica que por muchos propietarios es considerada como la última opción, luego de haber tratado de disminuir costos y ahorrar en otras áreas que no afecten a la sociedad.
Álvarez de los Santos dijo que hay una falta de circulante en la Comarca Lagunera, lo que este sector ha resentido desde "la cuesta de enero" del presente año, pero esta situación se ha extendido hasta febrero y las perspectivas en los meses siguientes no son muy favorables.
"No es la falta de inversión, no es la falta de promoción, realmente ahorita lo que falta es dinero para que la gente, los comerciantes, vayan a nuestros restaurantes", comentó.
El empresario señaló que el pasado 14 de febrero fue un día "relativamente bueno", pues aunque salvó a los restaurantes de algunas deudas como la renta, no fue lo que esperaban, ya que se quedaron abajo en un 30 por ciento con respecto a los años 2007 y 2008.
"El 14 de febrero se tomaba un fin de semana largo, ahora sólo fue un día el importante", dijo.
El presidente de la Canirac dijo que cada vez son más frecuentes los restaurantes que deciden suspender labores los primeros días de la semana y sólo laboran de jueves a domingo, cuando la afluencia de clientes es mayor, esto con la finalidad de evitarse más gastos.
Álvarez de los Santos dijo que cada establecimiento cuenta con su propia estrategia de publicidad con anuncios o cupones, mientras que la Cámara les apoya actualmente con capacitación, cursos y gestoría en problemas que pudieran presentarse al tramitar sus permisos de funcionamiento, tarjetas del Seguro Social de los empleados, el Infonavit, entre otros.
El dirigente empresarial dijo que los despidos del sector restaurantero se han presentado tanto en pequeños locales como en grandes establecimientos, además de que no son privativos de un sector específico de la región sino que se presentan en distintos puntos de La Laguna, todos ellos afectados por la crisis, la falta de circulante y la inseguridad.
Álvarez de los Santos dijo que, ante la inseguridad, muchos negocios de este tipo han optado por cerrar hasta dos horas antes de su jornada regular, como una medida de tranquilidad tanto para los propios empleados como para la clientela.
Apoyan a desempleados
Un promedio de 250 solicitudes de apoyo recibe diariamente el Módulo de Inscripción por Seguro de Desempleo que el Gobierno de Durango instaló en Gómez Palacio.
El secretario de Trabajo y Previsión Social de la entidad, Miguel Bermúdez Quiñones, informó que el programa dispone de una bolsa de 50 millones de pesos, encaminada a apoyar alrededor de diez mil familias en todo el territorio duranguense.
El seguro de desempleo consiste en mil pesos mensuales hasta por cinco meses, para quienes comprueben haberse quedado sin empleo desde el primer día del año.
El Módulo está operando en el edificio de bulevar Miguel Alemán y avenida Mina en Gómez Palacio y los interesados deben llevar una identificación oficial, el número de seguridad social, acta de nacimiento y comprobante de domicilio.
El funcionario señaló que se percibe un panorama difícil durante los dos primeros trimestres del año, aunque reconoció que el programa no será suficiente para paliar los efectos de los despidos, que superaron los cuatro mil 500 durante 2008.
En Durango se requiere una generación cercana a las 12 mil nuevas fuentes de empleo anualmente, cuya meta difícilmente podrá atenderse.