Por sorpresa. Dadas las condiciones de su humilde vivienda, el frío logra colarse por todos los rincones.
Aunque conocía el pronóstico del tiempo, las bajas temperaturas sorprendieron a doña Aurelia Palacios. Tiene una vivienda de siete por cinco metros de adobe en la colonia Prudencia Jáuregui de Lerdo.
Por sus frágiles cristales cubiertos por delgadas sábanas, logra colarse el viento, que durante la madrugada de ayer alcanzó los cinco grados centígrados.
A sus 82 años de edad le es difícil escuchar, condición que una pluma y un pedazo de papel pueden resolver. Con dificultad, cuenta que el frío la sorprendió. "Sí sabía que haría frío pero no tanto", comenta la mujer de avanzada edad.
COMO UN CONGELADOR
Reparar los cristales de sus ventanas y su puerta y colocar algunos más en donde hace falta, es casi imposible: el dinero es insuficiente. Y es que hasta hace unos meses, doña Aurelia recibía de forma mensual 500 pesos, ayuda que le fue suspendida sin razón alguna, dice.
El frío es despiadado al interior de su vivienda. Aunque pequeña, no logra calentarse con el fuego de su pequeña estufa.
En tiempo de lluvia, su frágil techo construido con maderas y un poco de tierra resulta insuficiente para cubrirla. En temporada invernal, la situación se torna aún más difícil, pues el aire helado logra colarse, además de sus ventanas, por todo su techo.
"Toda se gotea, he pedido ayuda a las autoridades y nada", dice doña Aurelia cubierta con un suéter largo y una bufanda que rodea todo su rostro.
Por tales condiciones, Aurelia sale de vez en cuando de casa a barrer o a saludar a sus vecinos, a fin de calentar un poco sus manos y rostro, bajo los rayos del sol.
En tanto las autoridades no le devuelvan su ayuda que recibía de forma mensual, las condiciones de su vivienda serán las mismas, puesto que su hijo, con quien comparte su hogar, sólo tiene trabajo en ocasiones de jardinero y su sueldo no alcanza para las reparaciones.
Mientas tanto Doña Aurelia continuará sufriendo las inclemencias del tiempo.
AURELIA PALACIOS
Ama de casa