Cuando regresaba a su casa luego del trabajo, Fermín perdió la vida intempestivamente tras ser arrollado en la carretera Pedriseña-Nazas, el viernes.
De rinde
Fermín Castañeda Flores, quien tenía 30 años y vivía en el municipio de Nazas, fue a regar unas parcelas en una pequeña propiedad de la zona.
Aproximadamente a las 7:00 de la tarde, se retiró del lugar para irse a su casa. En el camino, la bicicleta que tripulaba se ponchó y Fermín tuvo que caminar un largo tramo a un costado de la carpeta asfáltica.
Casi llegando a su poblado, fue embestido por un vehículo que no detuvo su marcha. Algunas personas alcanzaron a escuchar el golpe, pero al voltear no vieron qué fue lo que lo arrolló. Sólo estaba él tirado en la carretera.
Tristeza
Cerca de las 8:00 de la noche, Adriana Flores Ayala, mamá de Fermín, recibió la llamada de parte de un familiar que le avisaba que su hijo había sido atropellado, por lo que entró en crisis nerviosa.
Adriana, quien vive en Lerdo, trasladó a su hijo a la Cruz Roja de Gómez, pero luego de unos minutos perdió la vida.
