Santos, con una delantera agresiva pero sin puntería

Barata les salió la derrota a los Gallos Blancos de Querétaro, luego de caer 2-0 ante los Guerreros del Santos Laguna, que se dieron el lujo de fallar cualquier cantidad de oportunidades ante el marco del equipo comandado por el veterano entrenador Carlos Reynoso.

Los queretanos, que ocupan el último lugar de su grupo, de la tabla general y de la tabla de porcentajes, llegaron al Corona con la intención de llevarse un punto, pero debido a sus limitaciones y miedo a la derrota terminaron por ganarse a pulso este resultado que les da un empujoncito más al circuito de ascenso.

Por su parte, Santos Laguna, que sigue en la lucha por las posiciones de honor de su grupo, mostró deseos de hacer las cosas bien, pero el exceso de confianza, la ambición de algunos de sus jugadores por brillar con luz propia y desde luego la falta de puntería que adolecen algunos más, provocó que el resultado, que bien pudo ser goleada, terminara apenas 2-0.

Así, con un estadio que no registró un lleno en sus tribunas, los Guerreros salieron a comerse a los Gallos, pero poco lograron ante la falta de contundencia, ello a pesar de tener a su favor una buena cantidad de arribos.

A pesar de los tantos de Juan Pablo Rodríguez y Carlos Darwin Quintero, los arribos de "Lorito'' Jiménez, Ludueña, Guty Estrada, Juan Carlos Mosqueda, Carlos Ochoa y los mismos autores de los goles resultaron infructuosos para meter la pelota al marco, aún en jugadas por demás claras, donde prácticamente se cantaban los goles.

Mención especial merece Carlos Ochoa, quien pese a su esfuerzo en la cancha ni por casualidad logra enviar la pelota al fondo de la redes, propiciando los constantes abucheos en su contra por parte de un buen sector de aficionados.

El mismo equipo albiverde fue abucheado al medio tiempo, aún y cuando estaba ya arriba en el marcador, y lo mismo ocurrió al final del partido.

Así, la jornada de ayer para la escuadra santista no fue del todo redonda, ya que pese al triunfo y los tres puntos que suma deja grandes dudas en cuanto a la capacidad del plantel, que sigue adoleciendo de la claridad y contundencia a la ofensiva que le daba un elemento como Christian Benítez.

Triunfo importante, pero lejos de tener brillo y ese sabor que deja un buen partido.